[Este fue un comentario hace 10 años]
No es la drogadicción lo que distorsiona la función social, la droga solo distorsiona la mente del adicto. Es el negocio ilegal del tráfico de drogas y sus métodos de dominio del mercado lo que induce la decadencia social.
Mire usted, cuando la legalidad regula las actividades económicas, un tribunal federal puede, por ejemplo, declarar monopolio a la plataforma Windows de Bill Gates, al cual usted y yo somos adictos, y hacerle perder de la noche a la mañana 80 mil millones de dólares en la bolsa de valores. [El País, 2000-04-04]. Y nadie asesina a nadie.
Cuando la economía no es legal, los negocios se arreglan matando al competidor o a cualquiera que afecte el interés particular del empresario ilegal.
Una extraña (y sospechosa) concepción de la moralidad ha impedido la legalización del consumo de drogas hoy (10 años), en los mismos términos que se legalizó en su tiempo el consumo de bebidas alcohólicas (ha 80 años).
Las compañías cigarreras han perdido serias demandas por los daños que el tabaco causa a los consumidores. Algunas se han declarado en quiebra ante los costos de las indemnizaciones masivas. No ha habido ni un solo levantado, encobijado, torturado o ejecutado por eso.
Si usted quisiera demandar a los productores de derivados de la hoja de coca o mariguana porque tienen a su hijo hecho un idiota, ¿contra quién la elevaría? ¿Contra el cártel de Tijuana? (Los macizos de entonces)¿Contra los productores colombianos? (Los reyes de la coca) ¿Contra los elegantes mafiosos financieros modernos de los EU? (Los verdaderos jefes de jefes).
La prohibición de cualquier actividad comercial automáticamente la convierte en mercado negro: sea contrabando de simples productos comerciales a través de la frontera o bien el tráfico de enervantes y armas.
Todos los gobiernos involucrados en el problema del narcotráfico (especialmente EU) son altamente sospechosos al menos de negligencia y de gastos onerosos inútiles frente a este problema. Es claro que son rehenes, y beneficiarios al mismo tiempo, de las utilidades monetarias nada deleznables que el ilegal negocio narco reditúa inmediatamente, y de sus métodos de chantaje, amenaza o asesinato.
La adicción a las drogas es una enfermedad, igual que el alcoholismo; eso es cierto. Pero la prohibición y no-regulación del negocio narco sigue siendo un crimen irracionalmente mantenido por las autoridades, manteniendo (a sabiendas o no) las matanzas de los pobres y el lavadero de los ricos al mismo tiempo: es un crimen social. [JPR, PB, 2000-04-04]
Pensándolo bien... Bueno, bueno, eso decíamos aquí hace 10 años junto con varias voces en el desierto; ahora las cosas son muy diferentes… ¿O no?
http://jperezrobles.spaces.live.com/blog; PB100329LavarYMatar.docx; 07:03; 2407Car.
martes, 30 de marzo de 2010
sábado, 27 de marzo de 2010
Estar sola (o solo) - Vida Cotidiana - 26 MZO 10
Desde la concepción de la persona sin pareja como “la quedada” de la familia, en los siglos del pasado, vivir sola goza de mala fama.
Sin embargo, sea por la causa social que sea, el número de personas que están sin pareja que viven y trabajan normalmente (cuando tienen trabajo), ha aumentado en la sociedad.
Usted podría decir que la nueva generación le teme a las responsabilidades económicas de la formación de pareja o familia, y tendrá razón; puede decir que los ejemplos de familia que han visto durante su crecimiento en la pareja de sus padres, o lo que queda de ella, no es un buen estímulo para formar una nueva pareja propia, y tiene razón; usted puede concluir que la tasa de desempleo y las condiciones críticas de los individuos en sociedad dificulta el mantenimiento de una familia, y también tiene razón; puede pensar que las mujeres que trabajan se les ha vuelto más difícil el formar pareja por el temor de que signifique perder su empleo y su libertad individual, y que los hombres que pueden idealizar o respetar son cada vez más escasos, y no se equivoca; puede también decir que los hombres sufren de una ambivalencia entre su imagen de pareja femenina tradicional, que no pueden solventar, y el modelo de mujer nueva, que trabaja, que es económicamente independiente, y que lógicamente exigirá mayor igualdad de derechos en la casa, y eso también es cierto...
Las hipótesis pasan todas por el mismo lugar común: la formación de pareja, o sea el estar en compañía, el no estar sola (o solo), pasa hoy en día por una revisión más escrupulosa por los jóvenes que lo que se acepta en los medios y en la cultura misma. Por tanto, el concepto de estar solo y los sentimientos de malestar se asocian con el sentirse marginado por la sociedad; sentir la ansiedad que viene de la naturaleza, cuyo reloj biológico llama con insistencia a la reproducción de la especie (o sea a tener hijos y criarlos); soportar la presión de grupo social y familiar para que se casen; en suma, existe la sensación de que la condición de soledad individual todavía es mal vista por el resto (al grado de sospechar de la preferencia sexual del soltero/a) y eso todavía flota en las relaciones sociales como una inercia de la cultura dominante del pasado, que se contradice brutalmente con la realidad social y económica del presente.
Lo más lógico en estas condiciones es que se produzca angustia, ambivalencia, bipolaridad, y cuanto síntoma haya del malestar que provocan las contradicciones propias de esta cultura en la que vivimos.
La realidad social es que la norma productiva por excelencia es “la máxima ganancia con el mínimo esfuerzo”, y la formación de pareja, tal como se daba hasta ahora, representa exactamente lo contrario a esa norma. Y ese es el conflicto básico del escenario cotidiano que define estar sola(o) o en familia.
El amor romántico había sido el antídoto contra la dificultad de formar pareja en el pasado y, a pesar de los pesares, lo sigue siendo ahora: ambas partes de la pareja enamorada se sienten capaces de todo con tal de vivir juntos; y las bodas siguen haciendo cola en la agenda del templo que les toca.
Pero la actitud de las parejas enamoradas y sus decisiones, algo ansiosas y obsesivas, sobre un asunto que les cambiará la vida cotidiana radicalmente, hace pensar inevitablemente que el enamoramiento es una especie de locura socialmente aceptada; que “el amor es ciego” no es solo un dicho sino una verdad popular, dada la proliferación de peticiones de mano en las páginas de sociales; y todas las demás connotaciones bonitas de esta forma de amor así de romántico y a todas luces irracional como quiera, obligan al resto de la sociedad a no ver ningún tipo de cuestionamiento a esa manera de hacer pareja o resolver el problema de estar solo/a.
La sociedad indudablemente necesita de su “célula social” que es la familia, y no hay familia sin formación de pareja y todo eso que se necesita para reproducir a la especie; y por supuesto, todo el estado (gobierno e iglesia incluidos) tiene que bendecir al amor romántico.
Pero entonces ¿qué hacemos con tantos muchachos y muchachas que aumentan las filas de los hombres solos y mujeres solas en el mundo? (Y conste, aquí donde usted está oyendo esto, también ES el mundo); por cierto las que están solas (o solos) NUNCA aparecerán en las páginas de sociales anunciando su “soltería oficial hasta que la muerte los separe... de sí mismos”.
En estas condiciones es que en las áreas urbanas surgen los grupos gimnásticos, los deportes extremos, los cruceros caribeños especiales, los moteles temporales urbanos, los grupos de boliche, ciclismo y otras actividades donde lo que menos importe sea el estado civil.
Y en el internet pululan los correos con bellísimas presentaciones “Power Point”, aconsejando sobre cómo concebir bien al amor romántico y cómo reconstruir “los valores de la familia”; valores que le parecen obsoletos a esta generación y están tal vez guardados en un nicho por la anterior generación, que vivió en un pasado siempre mejor, pero que no sabe cómo vivir en el presente.
Y bueno, si lo romántico existe (o sea, si todo pasado fue mejor) no resulta tan falso que la crítica popular ponga en boca de alguno de los enamorados su deseo de vivir juntos con la frase irónica “Aunque sea debajo de un guamúchil”; árboles que por cierto son hoy más imposibles de conseguir en lo urbano que una casa de interés social, la que a su vez será una casa destinada a que se la quiten y perderla, cuando no la puedan seguir pagando por falta de empleo, lo que resulta ser un representante concreto y material de la abstracta e ideológica “Pérdida de los valores familiares”.
Por otra parte, también en la red brotan de cualquier lugar terapeutas al vapor que aconsejan con toda la boca llena de sabiduría, como si fueran consejeros financieros de Wall Street, diciendo lo que más le conviene a usted creer sobre sí mismo y los demás. Y lanzan ‘urbi et orbi’, en ausencia de un método serio, supuestas hipótesis que no pasan de ser audaces ocurrencias sobre el alma humana; (al fin que “cada cabeza es un mundo”...).
No sé usted, pero yo francamente lo dudo. Existen algunas no tan sutiles diferencias entre enseñar y amaestrar; entre transmitir conocimiento y adoctrinar (y de pasada hacer negocio con la ignorancia).
Mire usted, es cierto que el amor romántico está a la baja en las bolsas de valores para aquellos que están en edad de merecer; pero cuando se baña a un niño, hay que tener cuidado de no tirar al niño junto con el agua sucia de la bañera.
O sea, no por la desilusión que produce el afecto real una vez que se acaba el enamoramiento fantaseado por los miembros de la pareja, vamos a castigar al amor con nuestro abandono total, en el nombre de la razón. No hay nada más terrible en la vida (en el sentido estético, pero también en su capacidad de producir terror) que la falta de esa porción de amor necesaria para la subsistencia del espíritu. Y la razón sirve para explicarlo, pero no para denegarlo.
No hay terapia en el mundo que nos salve de la tristeza “endógena”, que no es otra cosa que el clamor por tener al menos una ración mínima de amor o de su representante en mi espíritu, que venga a mí de otra persona. Así se dio desde el origen en la cuna y no hay destete que lo cure, ni adolescencia que lo destruya, ni madurez que lo ‘supere’, ni política que lo reemplace; ni nada que lo pretenda sustituir con cualquier alimento chatarra para el espíritu.
Y esa tristeza, como los demás malestares que produce la cultura dominante, son avisos críticos de que nuestras formas de organización social, incluyendo la familia, dejan mucho qué desear para el buen desarrollo de la persona humana.
Y si la estadística muestra más de esa tristeza que la que debiera estar ahí en el mundo, entonces lo que está mal no es la adaptación del individuo al mundo, sino la organización del mundo que impide que el individuo se adapte con gusto a cada nueva estación de su crecimiento.
Suficiente problema es para cada individuo de la especie la simple supervivencia, para que encima le quieran endilgar que SU tristeza por SU soledad se debe a que no se ha adaptado a vivir consigo mismo. Algo no está bien planteado ahí desde el principio.
La recurrencia, en las películas de ciencia-ficción, de las escenas donde los extraterrestres súper-avanzados que nos invaden, terminan vencidos o convencidos por el incomprensible amor de los humanos, tiene más razón que la que cree. Blas Pascal lo dijo muy claro hace 4 siglos: “El corazón tiene razones que la razón ignora”.
El amor (con o sin adjetivos) actúa así de irracional, es cierto; pero tal vez sea porque nuestra razón todavía no es suficientemente “racional” para que podamos vivir en sociedad sin destruirnos y tampoco sirve mucho para vérnoslas con nuestros afectos, nuestros sueños, fantasías y deseos. La evolución es aún joven.
Estar solo es una experiencia antropológica y social, que primero se debe explicar como tal en lugar de hacer hipótesis psicológicas pragmáticas a la ligera; la soledad del individuo urbano no es una experiencia nacida del afecto (aunque la soledad afecte al afecto y genere una falsa concepción de sí mismo), es un fenómeno fundamentalmente social cultural, no necesariamente psicológico.
Es saludable aprender a ESTAR solo sin ser abatido por la sensación de SENTIRSE solo y abandonado en esta vida matraca. Eso no tiene discusión.
Pero si el amor a mí mismo no alcanza a ver que mi necesidad de amor es la misma necesidad de la otra persona con la que vivo (como lo cantara John Lennon) entonces la sociedad amorosa no funcionará. No importa la aparente razón de mi discurso.
Es más, si el instinto básico de atracción no se anida en la compleja elección de pareja, tampoco funcionará: no importa qué tanto aprenda yo a vivir estando solo aún cuando estoy en compañía.
No hay manera de separar lo irracional del amor con lo racional del pensamiento que pretende una manera inteligente de vivir la vida cotidiana.
Eso es tan imposible como separar en vida al cuerpo y el alma: están unidos “hasta que la muerte los separe”.
La razón que me permite estar sola (o solo) tiene el mismo peso y la misma necesidad que el deseo ancestral de estar en compañía de otro ser humano amado.
http://jperezrobles.spaces.live.com; VC100326EstarSolo.docx ;16:53;8605Car
Sin embargo, sea por la causa social que sea, el número de personas que están sin pareja que viven y trabajan normalmente (cuando tienen trabajo), ha aumentado en la sociedad.
Usted podría decir que la nueva generación le teme a las responsabilidades económicas de la formación de pareja o familia, y tendrá razón; puede decir que los ejemplos de familia que han visto durante su crecimiento en la pareja de sus padres, o lo que queda de ella, no es un buen estímulo para formar una nueva pareja propia, y tiene razón; usted puede concluir que la tasa de desempleo y las condiciones críticas de los individuos en sociedad dificulta el mantenimiento de una familia, y también tiene razón; puede pensar que las mujeres que trabajan se les ha vuelto más difícil el formar pareja por el temor de que signifique perder su empleo y su libertad individual, y que los hombres que pueden idealizar o respetar son cada vez más escasos, y no se equivoca; puede también decir que los hombres sufren de una ambivalencia entre su imagen de pareja femenina tradicional, que no pueden solventar, y el modelo de mujer nueva, que trabaja, que es económicamente independiente, y que lógicamente exigirá mayor igualdad de derechos en la casa, y eso también es cierto...
Las hipótesis pasan todas por el mismo lugar común: la formación de pareja, o sea el estar en compañía, el no estar sola (o solo), pasa hoy en día por una revisión más escrupulosa por los jóvenes que lo que se acepta en los medios y en la cultura misma. Por tanto, el concepto de estar solo y los sentimientos de malestar se asocian con el sentirse marginado por la sociedad; sentir la ansiedad que viene de la naturaleza, cuyo reloj biológico llama con insistencia a la reproducción de la especie (o sea a tener hijos y criarlos); soportar la presión de grupo social y familiar para que se casen; en suma, existe la sensación de que la condición de soledad individual todavía es mal vista por el resto (al grado de sospechar de la preferencia sexual del soltero/a) y eso todavía flota en las relaciones sociales como una inercia de la cultura dominante del pasado, que se contradice brutalmente con la realidad social y económica del presente.
Lo más lógico en estas condiciones es que se produzca angustia, ambivalencia, bipolaridad, y cuanto síntoma haya del malestar que provocan las contradicciones propias de esta cultura en la que vivimos.
La realidad social es que la norma productiva por excelencia es “la máxima ganancia con el mínimo esfuerzo”, y la formación de pareja, tal como se daba hasta ahora, representa exactamente lo contrario a esa norma. Y ese es el conflicto básico del escenario cotidiano que define estar sola(o) o en familia.
El amor romántico había sido el antídoto contra la dificultad de formar pareja en el pasado y, a pesar de los pesares, lo sigue siendo ahora: ambas partes de la pareja enamorada se sienten capaces de todo con tal de vivir juntos; y las bodas siguen haciendo cola en la agenda del templo que les toca.
Pero la actitud de las parejas enamoradas y sus decisiones, algo ansiosas y obsesivas, sobre un asunto que les cambiará la vida cotidiana radicalmente, hace pensar inevitablemente que el enamoramiento es una especie de locura socialmente aceptada; que “el amor es ciego” no es solo un dicho sino una verdad popular, dada la proliferación de peticiones de mano en las páginas de sociales; y todas las demás connotaciones bonitas de esta forma de amor así de romántico y a todas luces irracional como quiera, obligan al resto de la sociedad a no ver ningún tipo de cuestionamiento a esa manera de hacer pareja o resolver el problema de estar solo/a.
La sociedad indudablemente necesita de su “célula social” que es la familia, y no hay familia sin formación de pareja y todo eso que se necesita para reproducir a la especie; y por supuesto, todo el estado (gobierno e iglesia incluidos) tiene que bendecir al amor romántico.
Pero entonces ¿qué hacemos con tantos muchachos y muchachas que aumentan las filas de los hombres solos y mujeres solas en el mundo? (Y conste, aquí donde usted está oyendo esto, también ES el mundo); por cierto las que están solas (o solos) NUNCA aparecerán en las páginas de sociales anunciando su “soltería oficial hasta que la muerte los separe... de sí mismos”.
En estas condiciones es que en las áreas urbanas surgen los grupos gimnásticos, los deportes extremos, los cruceros caribeños especiales, los moteles temporales urbanos, los grupos de boliche, ciclismo y otras actividades donde lo que menos importe sea el estado civil.
Y en el internet pululan los correos con bellísimas presentaciones “Power Point”, aconsejando sobre cómo concebir bien al amor romántico y cómo reconstruir “los valores de la familia”; valores que le parecen obsoletos a esta generación y están tal vez guardados en un nicho por la anterior generación, que vivió en un pasado siempre mejor, pero que no sabe cómo vivir en el presente.
Y bueno, si lo romántico existe (o sea, si todo pasado fue mejor) no resulta tan falso que la crítica popular ponga en boca de alguno de los enamorados su deseo de vivir juntos con la frase irónica “Aunque sea debajo de un guamúchil”; árboles que por cierto son hoy más imposibles de conseguir en lo urbano que una casa de interés social, la que a su vez será una casa destinada a que se la quiten y perderla, cuando no la puedan seguir pagando por falta de empleo, lo que resulta ser un representante concreto y material de la abstracta e ideológica “Pérdida de los valores familiares”.
Por otra parte, también en la red brotan de cualquier lugar terapeutas al vapor que aconsejan con toda la boca llena de sabiduría, como si fueran consejeros financieros de Wall Street, diciendo lo que más le conviene a usted creer sobre sí mismo y los demás. Y lanzan ‘urbi et orbi’, en ausencia de un método serio, supuestas hipótesis que no pasan de ser audaces ocurrencias sobre el alma humana; (al fin que “cada cabeza es un mundo”...).
No sé usted, pero yo francamente lo dudo. Existen algunas no tan sutiles diferencias entre enseñar y amaestrar; entre transmitir conocimiento y adoctrinar (y de pasada hacer negocio con la ignorancia).
Mire usted, es cierto que el amor romántico está a la baja en las bolsas de valores para aquellos que están en edad de merecer; pero cuando se baña a un niño, hay que tener cuidado de no tirar al niño junto con el agua sucia de la bañera.
O sea, no por la desilusión que produce el afecto real una vez que se acaba el enamoramiento fantaseado por los miembros de la pareja, vamos a castigar al amor con nuestro abandono total, en el nombre de la razón. No hay nada más terrible en la vida (en el sentido estético, pero también en su capacidad de producir terror) que la falta de esa porción de amor necesaria para la subsistencia del espíritu. Y la razón sirve para explicarlo, pero no para denegarlo.
No hay terapia en el mundo que nos salve de la tristeza “endógena”, que no es otra cosa que el clamor por tener al menos una ración mínima de amor o de su representante en mi espíritu, que venga a mí de otra persona. Así se dio desde el origen en la cuna y no hay destete que lo cure, ni adolescencia que lo destruya, ni madurez que lo ‘supere’, ni política que lo reemplace; ni nada que lo pretenda sustituir con cualquier alimento chatarra para el espíritu.
Y esa tristeza, como los demás malestares que produce la cultura dominante, son avisos críticos de que nuestras formas de organización social, incluyendo la familia, dejan mucho qué desear para el buen desarrollo de la persona humana.
Y si la estadística muestra más de esa tristeza que la que debiera estar ahí en el mundo, entonces lo que está mal no es la adaptación del individuo al mundo, sino la organización del mundo que impide que el individuo se adapte con gusto a cada nueva estación de su crecimiento.
Suficiente problema es para cada individuo de la especie la simple supervivencia, para que encima le quieran endilgar que SU tristeza por SU soledad se debe a que no se ha adaptado a vivir consigo mismo. Algo no está bien planteado ahí desde el principio.
La recurrencia, en las películas de ciencia-ficción, de las escenas donde los extraterrestres súper-avanzados que nos invaden, terminan vencidos o convencidos por el incomprensible amor de los humanos, tiene más razón que la que cree. Blas Pascal lo dijo muy claro hace 4 siglos: “El corazón tiene razones que la razón ignora”.
El amor (con o sin adjetivos) actúa así de irracional, es cierto; pero tal vez sea porque nuestra razón todavía no es suficientemente “racional” para que podamos vivir en sociedad sin destruirnos y tampoco sirve mucho para vérnoslas con nuestros afectos, nuestros sueños, fantasías y deseos. La evolución es aún joven.
Estar solo es una experiencia antropológica y social, que primero se debe explicar como tal en lugar de hacer hipótesis psicológicas pragmáticas a la ligera; la soledad del individuo urbano no es una experiencia nacida del afecto (aunque la soledad afecte al afecto y genere una falsa concepción de sí mismo), es un fenómeno fundamentalmente social cultural, no necesariamente psicológico.
Es saludable aprender a ESTAR solo sin ser abatido por la sensación de SENTIRSE solo y abandonado en esta vida matraca. Eso no tiene discusión.
Pero si el amor a mí mismo no alcanza a ver que mi necesidad de amor es la misma necesidad de la otra persona con la que vivo (como lo cantara John Lennon) entonces la sociedad amorosa no funcionará. No importa la aparente razón de mi discurso.
Es más, si el instinto básico de atracción no se anida en la compleja elección de pareja, tampoco funcionará: no importa qué tanto aprenda yo a vivir estando solo aún cuando estoy en compañía.
No hay manera de separar lo irracional del amor con lo racional del pensamiento que pretende una manera inteligente de vivir la vida cotidiana.
Eso es tan imposible como separar en vida al cuerpo y el alma: están unidos “hasta que la muerte los separe”.
La razón que me permite estar sola (o solo) tiene el mismo peso y la misma necesidad que el deseo ancestral de estar en compañía de otro ser humano amado.
http://jperezrobles.spaces.live.com; VC100326EstarSolo.docx ;16:53;8605Car
viernes, 26 de marzo de 2010
Estar sola (o solo) - 26 MZO 10
Además del avance tecnológico, las relaciones afectivas también están pasando por profundas transformaciones y revolucionando el concepto del amor.
Lo que se busca hoy es una relación compatible con los tiempos modernos, en la cual exista individualidad, respeto, alegría y placer de estar juntos; y no una relación de dependencia en la cual uno responsabiliza al otro por su bienestar.
La idea que nació con el romanticismo, de que otra persona sea el remedio para nuestra felicidad, seguramente desaparecerá en este siglo.
El amor romántico parte de la premisa de que somos una fracción y necesitamos encontrar nuestra otra mitad para sentirnos completos; pero muchas veces se produce con ello un proceso de despersonalización que, históricamente, ha sido protagonizado por la mujer; ella abandona sus características propias para amalgamarse al proyecto masculino.
Con el avance tecnológico, que exige más tiempo individual, las personas están perdiendo el miedo de estar solas, y aprendiendo a convivir mejor consigo mismas; están comenzando a percibir que se sienten una fracción, pero que son un entero.
La nueva forma del amor tiene ahora otro significado: no es la unión de dos mitades, sino el complemento de dos enteros; por supuesto que esto solo se da en aquellos que consigan desarrollar su individualidad.
Cuanto más competente sea el individuo para vivir solo, más preparado estará para una relación afectiva. La soledad es buena, estar solo no es vergonzoso, al contrario, dignifica a la persona.
Las relaciones de dominación o de concesiones exageradas son cosas del siglo pasado (o el antepasado).
Muchas veces pensamos que el otro es nuestra alma gemela, cuando en realidad lo que hacemos es inventárnoslo a nuestro modo.
Todos deberíamos quedarnos solos de vez en cuando, para establecer un diálogo interno y descubrir nuestra fuerza personal.
En soledad, el individuo entiende que la armonía y la paz de espíritu solo pueden encontrarse dentro de él mismo, y no en función de otro; al percibirlo, se torna menos prejuicioso y más comprensivo con las diferencias, respetando la manera de ser de cada uno.
El amor de dos personas enteras que saben estar solos, es mucho más saludable; en este tipo de relación se puede dar el placer de la compañía y el respeto a la individualidad del ser amado al mismo tiempo. (Flávio Gikovate, Médico Psicoterapeuta brasileño)
[http://www.flaviogikovate.com.br/site/artigos_en_espanol.htm].
Independientemente de las coincidencias y diferencias con este pensamiento, que las hay, siempre es interesante escuchar nuevas hipótesis sobre las relaciones afectivas; especialmente cuando las formas tradicionales, basadas en la ilusión, por todos lados fracasan o terminan desilusionadas.
Pensándolo bien... Mañana escudriñaremos estos conceptos y otros, en Vida Cotidiana, por Stereo Uno a la una.
http://jperezrobles.spaces.live.com/blog; PB100326EstarSola.docx; 10:45; 2535Car
Lo que se busca hoy es una relación compatible con los tiempos modernos, en la cual exista individualidad, respeto, alegría y placer de estar juntos; y no una relación de dependencia en la cual uno responsabiliza al otro por su bienestar.
La idea que nació con el romanticismo, de que otra persona sea el remedio para nuestra felicidad, seguramente desaparecerá en este siglo.
El amor romántico parte de la premisa de que somos una fracción y necesitamos encontrar nuestra otra mitad para sentirnos completos; pero muchas veces se produce con ello un proceso de despersonalización que, históricamente, ha sido protagonizado por la mujer; ella abandona sus características propias para amalgamarse al proyecto masculino.
Con el avance tecnológico, que exige más tiempo individual, las personas están perdiendo el miedo de estar solas, y aprendiendo a convivir mejor consigo mismas; están comenzando a percibir que se sienten una fracción, pero que son un entero.
La nueva forma del amor tiene ahora otro significado: no es la unión de dos mitades, sino el complemento de dos enteros; por supuesto que esto solo se da en aquellos que consigan desarrollar su individualidad.
Cuanto más competente sea el individuo para vivir solo, más preparado estará para una relación afectiva. La soledad es buena, estar solo no es vergonzoso, al contrario, dignifica a la persona.
Las relaciones de dominación o de concesiones exageradas son cosas del siglo pasado (o el antepasado).
Muchas veces pensamos que el otro es nuestra alma gemela, cuando en realidad lo que hacemos es inventárnoslo a nuestro modo.
Todos deberíamos quedarnos solos de vez en cuando, para establecer un diálogo interno y descubrir nuestra fuerza personal.
En soledad, el individuo entiende que la armonía y la paz de espíritu solo pueden encontrarse dentro de él mismo, y no en función de otro; al percibirlo, se torna menos prejuicioso y más comprensivo con las diferencias, respetando la manera de ser de cada uno.
El amor de dos personas enteras que saben estar solos, es mucho más saludable; en este tipo de relación se puede dar el placer de la compañía y el respeto a la individualidad del ser amado al mismo tiempo. (Flávio Gikovate, Médico Psicoterapeuta brasileño)
[http://www.flaviogikovate.com.br/site/artigos_en_espanol.htm].
Independientemente de las coincidencias y diferencias con este pensamiento, que las hay, siempre es interesante escuchar nuevas hipótesis sobre las relaciones afectivas; especialmente cuando las formas tradicionales, basadas en la ilusión, por todos lados fracasan o terminan desilusionadas.
Pensándolo bien... Mañana escudriñaremos estos conceptos y otros, en Vida Cotidiana, por Stereo Uno a la una.
http://jperezrobles.spaces.live.com/blog; PB100326EstarSola.docx; 10:45; 2535Car
miércoles, 24 de marzo de 2010
Crimen, organizado o no - 24 MZO 10
Los gobiernos de México y EU anunciaron ayer la ampliación de la Iniciativa Mérida y que esta estrategia no sólo se enfocará en el aspecto policiaco-militar, sino también avanzará en el tema social. De igual manera, se comprometieron a profundizar la cooperación para combatir el crimen organizado y coordinar sus políticas nacionales en contra de esta amenaza.
Hillary Clinton, secretaria de Estado, explicó: “Estamos expandiendo la Iniciativa Mérida, más allá de lo que se había considerado inicialmente”, en busca de crear una estrategia integral en contra del narcotráfico.
En conferencia de prensa conjunta con la canciller Patricia Espinosa Cantellano, Clinton señaló que la demanda de droga en su país y el flujo de armas de EU a territorio mexicano, facilitan la violencia en México, por lo que Washington debe y está haciendo su parte para ayudar a afrontar estos retos. “Aceptamos nuestra responsabilidad compartida en el tema del tráfico de drogas”, puntualizó.
Resaltó que se están diseñando planes de trabajo concretos, específicos, con tareas, calendarios y mediciones en cuatro áreas estratégicas, que también mencionó Espinosa: la desarticulación de las organizaciones delictivas que actúan en los dos países; el fortalecimiento de las instituciones de seguridad; el desarrollo de una frontera segura y competitiva para el siglo XXI, y el fortalecimiento de la cohesión social en las comunidades de los dos lados de la frontera. [La Jornada, 2010-03-24]
De todo esto se puede desprender que EU meterá más dinero y más política para combatir al bien llamado Crimen Organizado, que es la parte estadounidense del narco.
La parte mexicana del narco sin embargo, sigue siendo un crimen des-organizado, donde la corrupción y el estado dentro del estado impone su propia ley escrita en narco-mantas, por la fuerza de las armas y la intimidación; frenando el desarrollo, deteniendo la vida diaria, produciendo una generación de familias paranoides y temerosas por su vidas.
El Crimen Organizado es el que gana millones de dólares en el enorme mercado de consumo de EU; se comporta limpiamente como empresa desarrollada, no muestra su poder con escándalos mediáticos criminales descuidados, sucios, sin importar el cochinero machista con el que asesinan a jóvenes todos los días, como en México.
Saben que si convierten a ese Crimen Organizado en EU en un consorcio de empresas más, como las cerveceras, vinateras y licoreras, el contrabando de armas se hará automáticamente innecesario y las matanzas desaparecerán.
Cualquier otra cosa será solo seguir haciéndose tontos como gobiernos y postergando el verdadero fin del narco ilegal.
Pensándolo bien... El mismo fin que tuvieron las matanzas y la corrupción del alcohol cuando levantaron la prohibición.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100324CrimenOrganizado.docx; 17:18; 2466Car.
Hillary Clinton, secretaria de Estado, explicó: “Estamos expandiendo la Iniciativa Mérida, más allá de lo que se había considerado inicialmente”, en busca de crear una estrategia integral en contra del narcotráfico.
En conferencia de prensa conjunta con la canciller Patricia Espinosa Cantellano, Clinton señaló que la demanda de droga en su país y el flujo de armas de EU a territorio mexicano, facilitan la violencia en México, por lo que Washington debe y está haciendo su parte para ayudar a afrontar estos retos. “Aceptamos nuestra responsabilidad compartida en el tema del tráfico de drogas”, puntualizó.
Resaltó que se están diseñando planes de trabajo concretos, específicos, con tareas, calendarios y mediciones en cuatro áreas estratégicas, que también mencionó Espinosa: la desarticulación de las organizaciones delictivas que actúan en los dos países; el fortalecimiento de las instituciones de seguridad; el desarrollo de una frontera segura y competitiva para el siglo XXI, y el fortalecimiento de la cohesión social en las comunidades de los dos lados de la frontera. [La Jornada, 2010-03-24]
De todo esto se puede desprender que EU meterá más dinero y más política para combatir al bien llamado Crimen Organizado, que es la parte estadounidense del narco.
La parte mexicana del narco sin embargo, sigue siendo un crimen des-organizado, donde la corrupción y el estado dentro del estado impone su propia ley escrita en narco-mantas, por la fuerza de las armas y la intimidación; frenando el desarrollo, deteniendo la vida diaria, produciendo una generación de familias paranoides y temerosas por su vidas.
El Crimen Organizado es el que gana millones de dólares en el enorme mercado de consumo de EU; se comporta limpiamente como empresa desarrollada, no muestra su poder con escándalos mediáticos criminales descuidados, sucios, sin importar el cochinero machista con el que asesinan a jóvenes todos los días, como en México.
Saben que si convierten a ese Crimen Organizado en EU en un consorcio de empresas más, como las cerveceras, vinateras y licoreras, el contrabando de armas se hará automáticamente innecesario y las matanzas desaparecerán.
Cualquier otra cosa será solo seguir haciéndose tontos como gobiernos y postergando el verdadero fin del narco ilegal.
Pensándolo bien... El mismo fin que tuvieron las matanzas y la corrupción del alcohol cuando levantaron la prohibición.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100324CrimenOrganizado.docx; 17:18; 2466Car.
lunes, 22 de marzo de 2010
Picachos - 22 MZO 10
¿Cómo se pasa de vivir en una comunidad rural, libre de problemas urbanos, donde el tiempo se mueve a velocidades humanas conforme a la naturaleza, donde las tribulaciones están asociadas hace muchas generaciones a la atención médica tradicional y casera de la salud, a la sabrosa alimentación con nutrición auto-regulada sin alimentos industrializados ‘chatarra’; donde los problemas son llegar a la escuela que no está aquí sino en el pueblo de enseguida, batallar con las plagas de las siembras y el ganado, todos esos problemas de la vida en el pueblo que ya todos olvidamos porque en la ciudad de eso solo se acuerdan algunos viejitos de café...? En fin, ¿cómo se pasa de vivir ahí a morir equivocamente en la línea de fuego de los narcos que compiten por la plaza?
Muy sencillo: es cuestión de que el gobierno de este país decida hacer una obra monumental “para el bien de sus ciudadanos y el progreso del municipio, del estado y del país”.
Esta es la falacia más grande de la función gubernamental: Actuar con criterio mafioso, con el criterio narcisista y autocomplaciente de cualquier megaempresa particular a la que la gente le interesa primero como mercado y al último como ciudadanos con derechos.
Esta vez se hizo lo que había que hacer para construir la presa Picachos: la licitación de los contratos bien pagados a los constructores, la compra de maquinaria extranjera para la generación de energía, etc., etc., etc. No perderemos el tiempo hablando de las corrupciones siempre posibles y nunca probables.
Solo diremos que ya se había conseguido, a golpe de discursos electoreros, cierta conciencia en la sociedad de que las cosas que se hicieran desde el gobierno, deberían incluir el derecho de la gente y con mucha más razón el derecho de los que menos tienen.
Promesas de los señores políticos y funcionarios que tanto cacarean en las elecciones, de los señores empresarios que se sienten los héroes de la nación por arriesgar su capital invirtiéndolo en un mega-proyecto de mega-millones de dólares que les darán mega-utilidades a sus empresas.
Así como el poder oficial y fáctico contempla con todo cuidado la administración de los millones del gasto que significa la gran obra, con márgenes de demasías por si falta pagarle a algún empresario que nos podría demandar; así deberían de incluir en la inversión de las obras el costo del desplazamiento de tierras, hogares y pueblos enteros, con un margen económico sobrado y una puntualidad en los tiempos de entrega eficaz, sin escusas.
El trato a los ciudadanos desplazados debe ser como el de quien se quiere ahorrar una demanda judicial que penalice a los gobiernos el tortuguismo en cumplir con el daño económico y moral causado a miles de personas, ancianos, niños, mujeres y ciudadanos, al menos 10 veces el valor oficial por incumplimiento
El criterio clasista de injusticia del poder rata, está mal de entrada: ¿“No hay dinero para los jodidos”?.
En el futuro la ley tendrá qué decir que si no hay dinero para los afectados, entonces que no haya dinero para la obra. Los gobernantes hace mucho que no son Dioses.
Pensándolo bien... Ningún progreso sirve si se construye sobre la miseria agregada de los pobres.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100322Picachos.docx; 11:40; 2767Car.
Muy sencillo: es cuestión de que el gobierno de este país decida hacer una obra monumental “para el bien de sus ciudadanos y el progreso del municipio, del estado y del país”.
Esta es la falacia más grande de la función gubernamental: Actuar con criterio mafioso, con el criterio narcisista y autocomplaciente de cualquier megaempresa particular a la que la gente le interesa primero como mercado y al último como ciudadanos con derechos.
Esta vez se hizo lo que había que hacer para construir la presa Picachos: la licitación de los contratos bien pagados a los constructores, la compra de maquinaria extranjera para la generación de energía, etc., etc., etc. No perderemos el tiempo hablando de las corrupciones siempre posibles y nunca probables.
Solo diremos que ya se había conseguido, a golpe de discursos electoreros, cierta conciencia en la sociedad de que las cosas que se hicieran desde el gobierno, deberían incluir el derecho de la gente y con mucha más razón el derecho de los que menos tienen.
Promesas de los señores políticos y funcionarios que tanto cacarean en las elecciones, de los señores empresarios que se sienten los héroes de la nación por arriesgar su capital invirtiéndolo en un mega-proyecto de mega-millones de dólares que les darán mega-utilidades a sus empresas.
Así como el poder oficial y fáctico contempla con todo cuidado la administración de los millones del gasto que significa la gran obra, con márgenes de demasías por si falta pagarle a algún empresario que nos podría demandar; así deberían de incluir en la inversión de las obras el costo del desplazamiento de tierras, hogares y pueblos enteros, con un margen económico sobrado y una puntualidad en los tiempos de entrega eficaz, sin escusas.
El trato a los ciudadanos desplazados debe ser como el de quien se quiere ahorrar una demanda judicial que penalice a los gobiernos el tortuguismo en cumplir con el daño económico y moral causado a miles de personas, ancianos, niños, mujeres y ciudadanos, al menos 10 veces el valor oficial por incumplimiento
El criterio clasista de injusticia del poder rata, está mal de entrada: ¿“No hay dinero para los jodidos”?.
En el futuro la ley tendrá qué decir que si no hay dinero para los afectados, entonces que no haya dinero para la obra. Los gobernantes hace mucho que no son Dioses.
Pensándolo bien... Ningún progreso sirve si se construye sobre la miseria agregada de los pobres.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100322Picachos.docx; 11:40; 2767Car.
domingo, 21 de marzo de 2010
Bullying - 20 MZO 10
Llámese bullying, violencia intrafamiliar, acoso o abuso, todo pertenece al universo de la rabia violencia noi reconocida, negada o mal administrada.
Y la mala conciencia, la negación o la mala administración de la ira caen en el mismo caso que la mala administración de los afectos amorosos o eróticos. Osea, caen en el desastre.
La violencia, dentro y fuera de casa, en la niñez, la adolescencia o la adultez, es una forma de devolución, de retorno de lo reprimido, es una explosión de nuestro mundo salvaje interno y desconocido, pero que no por ignorado deja de ser nuestro y de nadie más.
Como en todos los casos de nuestras fobias o discriminaciones, de nuestras filias o adicciones, la violencia en la escuela o en la familia es el producto de una interpretación directa y sin elaborar de lo que nosotros vimos o creímos ver en nuestros padres y lo consideramos lo justo, lo apropiado o la única estrategia de supervivencia posible.
La violencia justificada es la más perniciosa de todas porque el violento no sabe hasta dónde llega esa justificación, no conoce límites. Algunas veces, la vista de la sangre del otro por mis heridas o la pérdida del conocimiento o el desmayo por el knock out de mis golpes puede hacer que me detenga asustado y ese sería mi límite. Algunas veces solo la muerte del otro me detiene. Y luego pensaré en el colmo de la justificación que “Ése no era yo”.
El abuso escolar está lleno de estas pruebas y errores que se cometen contra otros para asegurar mi supremacía que garantiza mi seguridad tan ausente de mi alma porque nunca pude estar seguro de que mis padres me amaron y transfiero del amor al odio el sentimiento al cruzar el umbral del patio de la escuela y ahí alguien me la tiene qué pagar.
La falta de amor paterno no está en el amor que mis padres sienten o no sienten por mí: está en la carencia de amor que yo siento, independientemente del amor real de mi madre primero y mi padre después. Ellos no fallan en amar, solo fallan en transmitir la seguridad de ese amor pase lo que pase al hijo.
Y con eso es suficiente para fabricar al ‘bully’ o abusivo que en la escuela nadie aguanta y todos temen. A veces hasta los maestros.
Por eso uno de mis hijos sí y otro no ‘me salió’ abusivo. Por eso nunca logro saber ‘en que fallé’. Por eso no entiendo por qué mi hijo puede ser violento.
Otras veces sí se sabe por qué, ya que la violencia intrafamiliar fue evidente durante en el crecimiento.
Los mecanismos primitivos humanos todos están ahí adentro, pero necesitan de estímulos en el entorno que los echen a andar, si no, nos moriremos con ellos adentro, sin violentar ni violar a nadie.
Y entre los mecanismos de liberación innatos del instinto agresivo y violento, está crecer atestiguando la violencia de otros entre sí o contra mí. Elo resto es crear escenarios parecidos en la escuela, en la calle, en el antro, en el narco. Y tan, tan.
El abuso es simple, es terrible, es triste.
http://jperezrobles.spaces.live.com; VC100320BullyingEpilogo.docx ;18:51;2530Car.
Y la mala conciencia, la negación o la mala administración de la ira caen en el mismo caso que la mala administración de los afectos amorosos o eróticos. Osea, caen en el desastre.
La violencia, dentro y fuera de casa, en la niñez, la adolescencia o la adultez, es una forma de devolución, de retorno de lo reprimido, es una explosión de nuestro mundo salvaje interno y desconocido, pero que no por ignorado deja de ser nuestro y de nadie más.
Como en todos los casos de nuestras fobias o discriminaciones, de nuestras filias o adicciones, la violencia en la escuela o en la familia es el producto de una interpretación directa y sin elaborar de lo que nosotros vimos o creímos ver en nuestros padres y lo consideramos lo justo, lo apropiado o la única estrategia de supervivencia posible.
La violencia justificada es la más perniciosa de todas porque el violento no sabe hasta dónde llega esa justificación, no conoce límites. Algunas veces, la vista de la sangre del otro por mis heridas o la pérdida del conocimiento o el desmayo por el knock out de mis golpes puede hacer que me detenga asustado y ese sería mi límite. Algunas veces solo la muerte del otro me detiene. Y luego pensaré en el colmo de la justificación que “Ése no era yo”.
El abuso escolar está lleno de estas pruebas y errores que se cometen contra otros para asegurar mi supremacía que garantiza mi seguridad tan ausente de mi alma porque nunca pude estar seguro de que mis padres me amaron y transfiero del amor al odio el sentimiento al cruzar el umbral del patio de la escuela y ahí alguien me la tiene qué pagar.
La falta de amor paterno no está en el amor que mis padres sienten o no sienten por mí: está en la carencia de amor que yo siento, independientemente del amor real de mi madre primero y mi padre después. Ellos no fallan en amar, solo fallan en transmitir la seguridad de ese amor pase lo que pase al hijo.
Y con eso es suficiente para fabricar al ‘bully’ o abusivo que en la escuela nadie aguanta y todos temen. A veces hasta los maestros.
Por eso uno de mis hijos sí y otro no ‘me salió’ abusivo. Por eso nunca logro saber ‘en que fallé’. Por eso no entiendo por qué mi hijo puede ser violento.
Otras veces sí se sabe por qué, ya que la violencia intrafamiliar fue evidente durante en el crecimiento.
Los mecanismos primitivos humanos todos están ahí adentro, pero necesitan de estímulos en el entorno que los echen a andar, si no, nos moriremos con ellos adentro, sin violentar ni violar a nadie.
Y entre los mecanismos de liberación innatos del instinto agresivo y violento, está crecer atestiguando la violencia de otros entre sí o contra mí. Elo resto es crear escenarios parecidos en la escuela, en la calle, en el antro, en el narco. Y tan, tan.
El abuso es simple, es terrible, es triste.
http://jperezrobles.spaces.live.com; VC100320BullyingEpilogo.docx ;18:51;2530Car.
martes, 16 de marzo de 2010
Silbando en la oscuridad - 16 MZO 10
Antes, cuando alguien tenía que cruzar por el panteón del pueblo cerca de la media noche, silbaba alguna tonada temblorosa para calmar su miedo a las almas en pena, famosas por hacer cosas terroríficas a los ciudadanos ajenos a las actividades fantasmagóricas ilegales.
Bueno, pues de todos los operativos narcos, el de este fin de semana largo en Los Mochis fue una demostración pública de delincuencia organizada, como la de Nueva York o Chicago; estuvo impecable, disciplinada y eficaz.
No hubo ningún muerto ni herido, excepto los que haya habido entre ellos mismos y que sus mismos “limpiadores” (‘cleaners’) recogieron inmediatamente y los sacaron del escrutinio de los medios; los efectos colaterales solo se reflejaron en los gritos de las madres a sus hijos que andaban jugando afuera de sus casas en el día de asueto obligatorio; una actividad febril en los teléfonos celulares de los jóvenes para darse emocionados unos a otros su versión desde el lugar de los hechos y el asalto a lineadirectaportal.com para reportarlo.
Apenas una media hora después de los hechos hubo llamadas de larga distancia para preguntar por el estado de su familia cuando se enteraron del operativo armado narco en el portal de internet.
Me veo tentado a agradecer a los capos que no hayan matado a ninguna persona que no es de la guerra, como decía el humorista Gila en su versión de la guerra civil española.
Los mirones fueron dispersados por los narcos que estaban trabajando en el operativo lanzando balazos al aire, como si fueran militares centroamericanos del siglo pasado y los periodistas acelerados fueron atentamente golpeados en la nuca y despojados de sus cámaras para evitar las exclusivas.
Todo estuvo fríamente calculado y salió como previsto.
Los operativos de reacción inmediata hicieron su labor de accionar las torretas de colores en equipos de cuatro patrullas que interrumpían de algún modo el tráfico normal, como siempre indiferente a la policía y continuando su camino mascullando maldiciones. Fin de la historia.
Las declaraciones a posteriori de las autoridades y los políticos todavía esta mañana no salen al aire ni a la prensa escrita; las policías se reducen al parte oficial, como debe ser; el ejército seguramente está en alerta en otros estados, los comentarios del blog abarrotan las notas. No hubo mantas, no hubo muertos.
En Los Mochis, el martes en la mañana después de la cruda del fin de semana largo, los que regresaron ayer de Camahuiroa (el Cancún de huarache de acá) amanecieron vivos, algunos tal vez despojados de las llaves de sus vehículos por algún retén bien comportado, réplica exacta de los retenes militares de antes: lacónicos, distantes, perdonavidas y atentos... Y cuando despertaron, el narco armado aún estaba ahí.
Epílogo: Nuestro compañero Fco. Arizmendi viajó este fin de semana largo a El Fuerte, para descansar de Culiacán.
La mala noticia es que, al regreso, un retén como ése lo despojó de su camioneta. Declaró a Línea Directa que lo que más le dolió fue “que se llevaran todos los coricos y las empanaditas”.
Pensándolo bien... La buena es que Arizmendi está vivo y seguirá aquí como usted: silbando en la oscuridad...
http://jperezrobles.spaces.live.com/ ; PB100316SilbandOscuridad.docx ;12:14;2785Car.
Bueno, pues de todos los operativos narcos, el de este fin de semana largo en Los Mochis fue una demostración pública de delincuencia organizada, como la de Nueva York o Chicago; estuvo impecable, disciplinada y eficaz.
No hubo ningún muerto ni herido, excepto los que haya habido entre ellos mismos y que sus mismos “limpiadores” (‘cleaners’) recogieron inmediatamente y los sacaron del escrutinio de los medios; los efectos colaterales solo se reflejaron en los gritos de las madres a sus hijos que andaban jugando afuera de sus casas en el día de asueto obligatorio; una actividad febril en los teléfonos celulares de los jóvenes para darse emocionados unos a otros su versión desde el lugar de los hechos y el asalto a lineadirectaportal.com para reportarlo.
Apenas una media hora después de los hechos hubo llamadas de larga distancia para preguntar por el estado de su familia cuando se enteraron del operativo armado narco en el portal de internet.
Me veo tentado a agradecer a los capos que no hayan matado a ninguna persona que no es de la guerra, como decía el humorista Gila en su versión de la guerra civil española.
Los mirones fueron dispersados por los narcos que estaban trabajando en el operativo lanzando balazos al aire, como si fueran militares centroamericanos del siglo pasado y los periodistas acelerados fueron atentamente golpeados en la nuca y despojados de sus cámaras para evitar las exclusivas.
Todo estuvo fríamente calculado y salió como previsto.
Los operativos de reacción inmediata hicieron su labor de accionar las torretas de colores en equipos de cuatro patrullas que interrumpían de algún modo el tráfico normal, como siempre indiferente a la policía y continuando su camino mascullando maldiciones. Fin de la historia.
Las declaraciones a posteriori de las autoridades y los políticos todavía esta mañana no salen al aire ni a la prensa escrita; las policías se reducen al parte oficial, como debe ser; el ejército seguramente está en alerta en otros estados, los comentarios del blog abarrotan las notas. No hubo mantas, no hubo muertos.
En Los Mochis, el martes en la mañana después de la cruda del fin de semana largo, los que regresaron ayer de Camahuiroa (el Cancún de huarache de acá) amanecieron vivos, algunos tal vez despojados de las llaves de sus vehículos por algún retén bien comportado, réplica exacta de los retenes militares de antes: lacónicos, distantes, perdonavidas y atentos... Y cuando despertaron, el narco armado aún estaba ahí.
Epílogo: Nuestro compañero Fco. Arizmendi viajó este fin de semana largo a El Fuerte, para descansar de Culiacán.
La mala noticia es que, al regreso, un retén como ése lo despojó de su camioneta. Declaró a Línea Directa que lo que más le dolió fue “que se llevaran todos los coricos y las empanaditas”.
Pensándolo bien... La buena es que Arizmendi está vivo y seguirá aquí como usted: silbando en la oscuridad...
http://jperezrobles.spaces.live.com/ ; PB100316SilbandOscuridad.docx ;12:14;2785Car.
lunes, 15 de marzo de 2010
¿Qué horas son? - 15 MZO 10
Con su permiso, no creo en las convenciones de los husos horarios del mundo. No le entiendo a la división del día cerca de Japón. No me explico por qué la hora de referencia es la de Greenwich y no la de Pekín o la de Nueva Dehli.
Nunca he comprendido por qué Arizona es el único estado de la unión americana que no se sujeta a la distribución del tiempo en todo el país. Tampoco me salían las cuentas de la CFE cuando le hacía publicidad al cambio de horario similar al de EU.
Mire usted, si todos decidimos que el metro es “La diezmillonésima parte de un cuadrante del meridiano terrestre”, es algo bueno para todos, porque la unidad de medida del espacio lineal es compartida por todos. Si queremos definirlo con mayor aproximación como “Un mega múltiplo de la longitud de onda del rayo láser de rubí”, no hay problema alguno mientras signifique la misma distancia para todos. Pero si alguien decidiera que ahora el metro va a significar metro y medio, la mitad del año, y un metro la otra, nos metería en problemas y todos protestaríamos inmediatamente.
En la física, una norma es la convención internacional de las instituciones científicas sobre una unidad de referencia.
Los cambios en cualquier norma siempre son problemáticos, siempre tienen efectos contradictorios o al menos complejos y no siempre los esperados.
Lo ideal definitivamente sería que todos acordáramos una misma norma de una vez por todas. La nomenclatura de la naturaleza no debería depender del comercio ni de la política, sino de las ciencias físicas.
Pero bueno, si la soberanía de los estados decide definir una propia norma para el tiempo en cada entidad, santo y bueno. Además, la voluntad política de las cámaras empresariales no es algo que se deba dejar así nomás sin atender.
Mientras tanto, los que somos la mayoría seguiremos trabajando las mismas horas diarias, ganaremos el mismo salario mínimo y después regresaremos a la norma antigua sintiendo que nunca debimos abandonarla, pero que a nosotros que somos la mayoría, nunca nos importó que la cambiaran.
Los intereses comerciales de Sonora en su relación con Arizona parece ser un buen argumento para mantenerse en la norma antigua (el mismo horario todo el año), pero ¿cuál será la razón de Jalisco? ¿Y la de nosotros? ¿Será cierto que la CFE mintió y que nos sale igual de caro? ¿Entonces para qué volver a cambiar?
¿Y si mañana se le ocurre a EU que todos los países del TLC deben tener los mismos husos horarios que ellos? ¿Volveremos a cambiar?
Mire usted, acá entre nos, es la misma; aunque no parece ser la misma para los gobiernos y los empresarios. En realidad, también lo demás solo parece ser importante para los gobiernos y los empresarios: ¿la educación, la salud, la seguridad, la política...? Bien, gracias.
Lo que sí sería útil es definir muy bien hasta donde llegan las soberanías. No sea que cuando usted pregunte: “¿Qué horas son?”, le respondan: “¿La de Mochis, la de Culiacán o la de Mazatlán?”. [JPR, PB, 2000-03-15] (Hace diez años).
Pensándolo bien... Este asunto de los horarios y los días feriados parece cambiar cada hora...
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100315LaHora.docx; 18:20; 2674Car.
Nunca he comprendido por qué Arizona es el único estado de la unión americana que no se sujeta a la distribución del tiempo en todo el país. Tampoco me salían las cuentas de la CFE cuando le hacía publicidad al cambio de horario similar al de EU.
Mire usted, si todos decidimos que el metro es “La diezmillonésima parte de un cuadrante del meridiano terrestre”, es algo bueno para todos, porque la unidad de medida del espacio lineal es compartida por todos. Si queremos definirlo con mayor aproximación como “Un mega múltiplo de la longitud de onda del rayo láser de rubí”, no hay problema alguno mientras signifique la misma distancia para todos. Pero si alguien decidiera que ahora el metro va a significar metro y medio, la mitad del año, y un metro la otra, nos metería en problemas y todos protestaríamos inmediatamente.
En la física, una norma es la convención internacional de las instituciones científicas sobre una unidad de referencia.
Los cambios en cualquier norma siempre son problemáticos, siempre tienen efectos contradictorios o al menos complejos y no siempre los esperados.
Lo ideal definitivamente sería que todos acordáramos una misma norma de una vez por todas. La nomenclatura de la naturaleza no debería depender del comercio ni de la política, sino de las ciencias físicas.
Pero bueno, si la soberanía de los estados decide definir una propia norma para el tiempo en cada entidad, santo y bueno. Además, la voluntad política de las cámaras empresariales no es algo que se deba dejar así nomás sin atender.
Mientras tanto, los que somos la mayoría seguiremos trabajando las mismas horas diarias, ganaremos el mismo salario mínimo y después regresaremos a la norma antigua sintiendo que nunca debimos abandonarla, pero que a nosotros que somos la mayoría, nunca nos importó que la cambiaran.
Los intereses comerciales de Sonora en su relación con Arizona parece ser un buen argumento para mantenerse en la norma antigua (el mismo horario todo el año), pero ¿cuál será la razón de Jalisco? ¿Y la de nosotros? ¿Será cierto que la CFE mintió y que nos sale igual de caro? ¿Entonces para qué volver a cambiar?
¿Y si mañana se le ocurre a EU que todos los países del TLC deben tener los mismos husos horarios que ellos? ¿Volveremos a cambiar?
Mire usted, acá entre nos, es la misma; aunque no parece ser la misma para los gobiernos y los empresarios. En realidad, también lo demás solo parece ser importante para los gobiernos y los empresarios: ¿la educación, la salud, la seguridad, la política...? Bien, gracias.
Lo que sí sería útil es definir muy bien hasta donde llegan las soberanías. No sea que cuando usted pregunte: “¿Qué horas son?”, le respondan: “¿La de Mochis, la de Culiacán o la de Mazatlán?”. [JPR, PB, 2000-03-15] (Hace diez años).
Pensándolo bien... Este asunto de los horarios y los días feriados parece cambiar cada hora...
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100315LaHora.docx; 18:20; 2674Car.
sábado, 13 de marzo de 2010
La envidia - 13 MZO 10
Es uno de los componentes más perniciosos del deseo.
Las formas de la envidia pueden ser las más simples y primitivas versiones de la agresión, curiosamente está relacionada con el objeto amoroso al que considera como parte del espacio vital, como parte de la propiedad territorial, como parte de la posesión patrimonial; o pueden ser formas sublimadas (elaboradas) que transfieren el sentimiento primitivo a los símbolos civilizados del éxito de otros; como son las posesiones materiales, la fama, la riqueza o cualquier forma de poder adquirido en el desarrollo individual o grupal.
La envidia aparece desde la configuración del triángulo madre-padre-hijo(a), luego se reproduce en la fratría o el grupo de los hermanos, por las diferencias de los sexos, del lugar que se ocupa en la escalera de las edades, y del desarrollo de la inteligencia individual que produce logros y reconocimientos familiares y sociales diferentes entre sí.
La envidia, como puede sospecharse, acompaña (aunque no determine) a toda lucha ideológica o de clase que se presente en las formaciones sociales de todo tipo. El concepto de poder no se puede entender sin la sombra de la envidia que lo acompaña.
En el trabajo diario, la envidia urbana está en toda la carrera masiva por el ascenso y la envidia en el campo hace tantos siglos que se mueve entre agricultores y ganaderos, que el pasaje bíblico de Caín y Abel representa el primer caso registrado de la civilización judeo-cristiana.
Lo que llamamos “la política” en tono peyorativo, como algo deleznable y repudiable, es la politiquería: es la lucha a codazos, alianzas imposibles y traiciones increíbles por pasar al frente de las oportunidades. La “grilla” es un concepto que alude a la envidia no muy bien escondida en la mezcla de estas construcciones.
Ningún sujeto carece de envidia sentida en sus relaciones hacia otros, así como nadie está libre de ser objeto de envidia de parte del otro o los otros.
Con la envidia pasa igual que con los celos, que han terminando siendo un caso particular de la envidia: No hay más que de dos tipos de envidiosos: los que lo son, y los que lo niegan.
La diferencia entre la envidia y los celos es que la envidia, por ser un producto de la cultura, algo más alejado del instinto territorial de origen animal, puede ser enmascarada por los mecanismos de adaptación social del sujeto, como una estrategia de supervivencia en grupo. La envidia puede hasta negarse, aunque ya nadie se crea tal negación, dado que es la esencia de lo “socialmente correcto”: todo mundo tiene qué aceptarla para conservar las relaciones de colaboración y competencia.
El acuerdo social sería: “Yo acepto que tú NO me envidias, a cambio de que tú aceptes que yo NO te envidio”. Y así se logra seguir la fiesta en paz: desde el nivel individual más íntimo, hasta el nivel de política internacional más amplio.
Así será hasta que la fiesta termine o se interrumpa porque una de las partes observe objetivamente, o simplemente ‘sienta’ paranoicamente que el otro haya roto el acuerdo ‘políticamente correcto’.
Las motivaciones o movimientos emocionales internos de la envidia siempre son justificados. Siempre se encuentran ahí afuera las razones que expliquen su existencia. El disfraz favorito de la envidia denunciada es siempre “la justicia”.
Lo que en medio de las envidias que se dan en la lucha por el poder político se llama fraude, en los tribunales electorales se llamará justicia.
Lo que durante mucho tiempo jugó un papel soterrado y tolerado por la envidia en el mercado negro del dinero lavado, se convirtió en una infiltración corrupta de los envidiados sistemas políticos y financieros que representan al poder real del globo y en la asociación de los países ricos que ahora forman una parte inocultable de la culpa de las crisis masivas mundiales.
O sea, la envidia no es un asunto pequeño, no es un chiste de color amarillo o verde de envidia, no es algo que aparecía solamente cuando abríamos los paquetes bajo el arbolito y veíamos que la muñeca era más chica o la pista de carritos menos ancha; la envidia está ahí en todas las formas de la agresión cotidiana, como fantasma invisible que tiene repercusiones en toda la civilización humana.
De ahí que el tema principal de muchas organizaciones monacales de diferentes religiones sea primordialmente la humildad contra la soberbia, la fraternidad contra la rivalidad, y llaman a dar amor en lugar de demandarlo, a poner cristianamente la otra mejilla ante la violencia, a guardar silencio budista zen para desactivar la agresión, a la meditación yoga contra la violencia del otro y la propia, al rezo obsesivo cantado como reloj humano y al martirio islámico.
Pero la envidia, junto con las demás pasiones salvajes, sigue ahí en el alma humana, a pesar de sus avances filosóficos, científicos o religiosos.
Cada vez peor en la medida que no se reconozca en lo profundo. No con un reconocimiento superficial y medio tramposo, como el de un pecado que vuelve a aparecer cada semana después de profundos estados de arrepentimiento, creyendo que con eso se le da gusto a Dios, que de seguro tiene muy buen sentido del humor, porque el engañado es al fin de cuentas el adicto a su pecado.
O sea, me engaño a mí mismo haciéndome creer que en mí ya no aparecerá la envidia, porque ya la lloré, la enterré, y prometí y decreté que esta es la última vez que la envidia corroe mi alma. Ajá.
La negación es el más eficaz de los mecanismos de defensa, hace desaparecer el malestar inmediatamente como por arte de magia: “Abracadabra” y la envidia desaparece. La culpa desaparece. Me siento bien.
El único problema es que como todos los demás movimientos del alma, o sea, como todas las emociones, mientras menos se reconozcan, se vuelven más perniciosas, fuertes y peligrosas. Es como atravesar la selva negando que haya víboras, como navegar el mar y negar que pueda haber tormentas o volar negando que se den turbulencias.
La única vía para vérselas con el malestar que provocan las pasiones es reconociendo mis emociones no deseadas o mis deseos prohibidos antes de apuntar con el dedo a las mismas pasiones reconocidas pero habitando al otro.
Insistimos aquí como siempre: no con la intención de desaparecer las pasiones y los deseos prohibidos para siempre, sino buscando cómo vivir con ellos adentro porque, me guste o no, serán mis compañeros de viaje por el resto de mi vida.
La envidia no es excepción.
Así que puede usted continuar envidiando a quienes dicen que no sufren de envidia porque lo tienen todo, que están completos y realizados o que son buenos musulmanes o budistas o muy buenos cristianos.
Tal envidia será gratuita, o sea inútil, porque no existe ni medio ser humano siquiera que tenga resuelta su vida así y ni de ninguna otra manera.
http://jperezrobles.spaces.live.com; VC100313Envidia.docx ;18:17;5575Car.
Las formas de la envidia pueden ser las más simples y primitivas versiones de la agresión, curiosamente está relacionada con el objeto amoroso al que considera como parte del espacio vital, como parte de la propiedad territorial, como parte de la posesión patrimonial; o pueden ser formas sublimadas (elaboradas) que transfieren el sentimiento primitivo a los símbolos civilizados del éxito de otros; como son las posesiones materiales, la fama, la riqueza o cualquier forma de poder adquirido en el desarrollo individual o grupal.
La envidia aparece desde la configuración del triángulo madre-padre-hijo(a), luego se reproduce en la fratría o el grupo de los hermanos, por las diferencias de los sexos, del lugar que se ocupa en la escalera de las edades, y del desarrollo de la inteligencia individual que produce logros y reconocimientos familiares y sociales diferentes entre sí.
La envidia, como puede sospecharse, acompaña (aunque no determine) a toda lucha ideológica o de clase que se presente en las formaciones sociales de todo tipo. El concepto de poder no se puede entender sin la sombra de la envidia que lo acompaña.
En el trabajo diario, la envidia urbana está en toda la carrera masiva por el ascenso y la envidia en el campo hace tantos siglos que se mueve entre agricultores y ganaderos, que el pasaje bíblico de Caín y Abel representa el primer caso registrado de la civilización judeo-cristiana.
Lo que llamamos “la política” en tono peyorativo, como algo deleznable y repudiable, es la politiquería: es la lucha a codazos, alianzas imposibles y traiciones increíbles por pasar al frente de las oportunidades. La “grilla” es un concepto que alude a la envidia no muy bien escondida en la mezcla de estas construcciones.
Ningún sujeto carece de envidia sentida en sus relaciones hacia otros, así como nadie está libre de ser objeto de envidia de parte del otro o los otros.
Con la envidia pasa igual que con los celos, que han terminando siendo un caso particular de la envidia: No hay más que de dos tipos de envidiosos: los que lo son, y los que lo niegan.
La diferencia entre la envidia y los celos es que la envidia, por ser un producto de la cultura, algo más alejado del instinto territorial de origen animal, puede ser enmascarada por los mecanismos de adaptación social del sujeto, como una estrategia de supervivencia en grupo. La envidia puede hasta negarse, aunque ya nadie se crea tal negación, dado que es la esencia de lo “socialmente correcto”: todo mundo tiene qué aceptarla para conservar las relaciones de colaboración y competencia.
El acuerdo social sería: “Yo acepto que tú NO me envidias, a cambio de que tú aceptes que yo NO te envidio”. Y así se logra seguir la fiesta en paz: desde el nivel individual más íntimo, hasta el nivel de política internacional más amplio.
Así será hasta que la fiesta termine o se interrumpa porque una de las partes observe objetivamente, o simplemente ‘sienta’ paranoicamente que el otro haya roto el acuerdo ‘políticamente correcto’.
Las motivaciones o movimientos emocionales internos de la envidia siempre son justificados. Siempre se encuentran ahí afuera las razones que expliquen su existencia. El disfraz favorito de la envidia denunciada es siempre “la justicia”.
Lo que en medio de las envidias que se dan en la lucha por el poder político se llama fraude, en los tribunales electorales se llamará justicia.
Lo que durante mucho tiempo jugó un papel soterrado y tolerado por la envidia en el mercado negro del dinero lavado, se convirtió en una infiltración corrupta de los envidiados sistemas políticos y financieros que representan al poder real del globo y en la asociación de los países ricos que ahora forman una parte inocultable de la culpa de las crisis masivas mundiales.
O sea, la envidia no es un asunto pequeño, no es un chiste de color amarillo o verde de envidia, no es algo que aparecía solamente cuando abríamos los paquetes bajo el arbolito y veíamos que la muñeca era más chica o la pista de carritos menos ancha; la envidia está ahí en todas las formas de la agresión cotidiana, como fantasma invisible que tiene repercusiones en toda la civilización humana.
De ahí que el tema principal de muchas organizaciones monacales de diferentes religiones sea primordialmente la humildad contra la soberbia, la fraternidad contra la rivalidad, y llaman a dar amor en lugar de demandarlo, a poner cristianamente la otra mejilla ante la violencia, a guardar silencio budista zen para desactivar la agresión, a la meditación yoga contra la violencia del otro y la propia, al rezo obsesivo cantado como reloj humano y al martirio islámico.
Pero la envidia, junto con las demás pasiones salvajes, sigue ahí en el alma humana, a pesar de sus avances filosóficos, científicos o religiosos.
Cada vez peor en la medida que no se reconozca en lo profundo. No con un reconocimiento superficial y medio tramposo, como el de un pecado que vuelve a aparecer cada semana después de profundos estados de arrepentimiento, creyendo que con eso se le da gusto a Dios, que de seguro tiene muy buen sentido del humor, porque el engañado es al fin de cuentas el adicto a su pecado.
O sea, me engaño a mí mismo haciéndome creer que en mí ya no aparecerá la envidia, porque ya la lloré, la enterré, y prometí y decreté que esta es la última vez que la envidia corroe mi alma. Ajá.
La negación es el más eficaz de los mecanismos de defensa, hace desaparecer el malestar inmediatamente como por arte de magia: “Abracadabra” y la envidia desaparece. La culpa desaparece. Me siento bien.
El único problema es que como todos los demás movimientos del alma, o sea, como todas las emociones, mientras menos se reconozcan, se vuelven más perniciosas, fuertes y peligrosas. Es como atravesar la selva negando que haya víboras, como navegar el mar y negar que pueda haber tormentas o volar negando que se den turbulencias.
La única vía para vérselas con el malestar que provocan las pasiones es reconociendo mis emociones no deseadas o mis deseos prohibidos antes de apuntar con el dedo a las mismas pasiones reconocidas pero habitando al otro.
Insistimos aquí como siempre: no con la intención de desaparecer las pasiones y los deseos prohibidos para siempre, sino buscando cómo vivir con ellos adentro porque, me guste o no, serán mis compañeros de viaje por el resto de mi vida.
La envidia no es excepción.
Así que puede usted continuar envidiando a quienes dicen que no sufren de envidia porque lo tienen todo, que están completos y realizados o que son buenos musulmanes o budistas o muy buenos cristianos.
Tal envidia será gratuita, o sea inútil, porque no existe ni medio ser humano siquiera que tenga resuelta su vida así y ni de ninguna otra manera.
http://jperezrobles.spaces.live.com; VC100313Envidia.docx ;18:17;5575Car.
jueves, 11 de marzo de 2010
Gruñen Sancho, luego hay cochinero - 11 MZO 10
Los persecutores del poder, porque esa es la única persecución que se ve en las publicaciones que por cierto es hora que deberían dar vergüenza al periodismo que las publica y que además les agregan comentarios “del público” (generalmente los mismos) de tan mala factura que derrotan el argumento propagandístico que deseaban comunicar y se les convierte ahí mismo en un simple exabrupto pornográfico, pobre y vil.
No hubo nunca campo para el sentido del humor en la propaganda fascista; tampoco hay esclarecimiento de ninguna duda en la propaganda actual. Nada está ni siquiera cerca de una pequeña verdad porque se desdibuja con la golpiza que le meten al español que creen escribir o hablar.
Algunas publicaciones simulan una neutralidad que nadie ve ni oye; el auditorio o el lector no tarda ni siquiera tres frases cuando brota el “conflicto de interés”, que hace mucho dejó de ser conflicto para convertirse en orgulloso panfleto de interés, al que se le transparenta todo lo que desea incomunicar.
Y claro, ni modo que puedan hablar de otra cosa cuando los supuestos políticos “de altura” se revuelcan en el lodo y las heces fecales de chiquero de rancho pobre, para dar el espectáculo en la tele; ahí se puede ver sin censura la pornografía de una diputada, desde la tribuna de la Cámara Baja (que hace honor a su adjetivo) diciendo que los medios (y no ella) dijeron que el Gobernador del Estado de México mató a su esposa.
No sólo las burradas infantiles sobre “someterse al detector de mentiras” que cualquier idiota puede hacer fallar, sino creer que la gente, (los ciudadanos a los que consideran súbditos ignorantes de cómo es esto de “los procedimientos parlamentarios”), se va a tragar toda esa porquería inflada de flatulencias que no solo avergüenzan a todos como república fallida, sino que dan náusea, por su bajeza, por no tener ni pizca de remedio y, más que todo, por condenar al país entero a un futuro totalmente NULO.
Por simple instinto de conservación de la formación social, no hay grupo humano que perdone tantos errores inducidos por la ambición del poder y el dinero de las representaciones públicas, estupidizándolas tanto como a cualquier adicto al alcohol, a la droga, al sadismo contra las mujeres o al asqueroso abuso infantil. Se merecen con creces lo que la ciudadanía aterrorizada, asqueada y sin nada qué perder decida hacer con ellos.
Pensándolo bien... Porque lo hará, tarde o temprano, lo hará. La historia no perdona.
http://jperezrobles.spaces.live.com/ ; PM100311Politiqueria.docx ;21:13;2135Car.
No hubo nunca campo para el sentido del humor en la propaganda fascista; tampoco hay esclarecimiento de ninguna duda en la propaganda actual. Nada está ni siquiera cerca de una pequeña verdad porque se desdibuja con la golpiza que le meten al español que creen escribir o hablar.
Algunas publicaciones simulan una neutralidad que nadie ve ni oye; el auditorio o el lector no tarda ni siquiera tres frases cuando brota el “conflicto de interés”, que hace mucho dejó de ser conflicto para convertirse en orgulloso panfleto de interés, al que se le transparenta todo lo que desea incomunicar.
Y claro, ni modo que puedan hablar de otra cosa cuando los supuestos políticos “de altura” se revuelcan en el lodo y las heces fecales de chiquero de rancho pobre, para dar el espectáculo en la tele; ahí se puede ver sin censura la pornografía de una diputada, desde la tribuna de la Cámara Baja (que hace honor a su adjetivo) diciendo que los medios (y no ella) dijeron que el Gobernador del Estado de México mató a su esposa.
No sólo las burradas infantiles sobre “someterse al detector de mentiras” que cualquier idiota puede hacer fallar, sino creer que la gente, (los ciudadanos a los que consideran súbditos ignorantes de cómo es esto de “los procedimientos parlamentarios”), se va a tragar toda esa porquería inflada de flatulencias que no solo avergüenzan a todos como república fallida, sino que dan náusea, por su bajeza, por no tener ni pizca de remedio y, más que todo, por condenar al país entero a un futuro totalmente NULO.
Por simple instinto de conservación de la formación social, no hay grupo humano que perdone tantos errores inducidos por la ambición del poder y el dinero de las representaciones públicas, estupidizándolas tanto como a cualquier adicto al alcohol, a la droga, al sadismo contra las mujeres o al asqueroso abuso infantil. Se merecen con creces lo que la ciudadanía aterrorizada, asqueada y sin nada qué perder decida hacer con ellos.
Pensándolo bien... Porque lo hará, tarde o temprano, lo hará. La historia no perdona.
http://jperezrobles.spaces.live.com/ ; PM100311Politiqueria.docx ;21:13;2135Car.
miércoles, 10 de marzo de 2010
México a Través de las Causas 10 MZO 10
Carlos Monsiváis dijo anteanoche que muchas de esas causas “se han catalogado como perdidas, pero también hay que reconocer que de las causas perdidas también se alimenta la resistencia de hoy”.
No obstante, “aunque están evaluadas, no están bien representadas las causas de los conservadores y de la derecha”, apuntó el ensayista.
“Sí hay referencias visuales al fallido imperio de Maximiliano, algunas fotografías del movimiento cristero, un pequeño nicho dedicado al padre Pro; pero no hay fotos de las cruzadas anticomunistas, las andanadas contra el libro de texto gratuito, ni de las quemas de material pornográfico, ni de la terquedad democrática del PAN en las décadas de 1940 y 1950, ni de las campañas de odio (del Sinarquismo) en el Bajío.
“Tampoco están representadas las causas de la sociedad civil de estos años, ni los esfuerzos cada vez más poderosos del empoderamiento, este nuevo término de eficacia tan probada en el país entero, ni está desplegado como se debe el impulso de los movimientos regionales, aunque sí se integra una intervención artística en uno de los muros del museo, dedicada al movimiento con un inicio extraordinario: la APPO en Oaxaca.”
Destacó que pese a que “hoy día la desigualdad afecta a todos de la misma manera que en 1910, y que es mucho más advertida, la mirada de los que están en la cumbre, por así decirlo, continúa siendo indiferente y a ratos patética en su deseo de que no exista o desaparezca la pobreza. La desigualdad es la gran semejanza a lo largo de todos estos años.
“No hay los indicios –añadió– de una gran revolución, pero hay un empoderamiento social como nunca se había visto y que sigue creciendo. Y aunque todavía no se va a manifestar como sería deseable en el aspecto electoral, sí está resistiendo en muchas partes.” [Carlos Paul, La Jornada, 2010-03-10]
Aquí en Sinaloa, sin ir tan lejos, como muestra basta un Picacho: una causa imposible más, cuya solución está en manos de políticos de lento aprendizaje (aunque parezca pleonasmo), quienes se comportan como sumisos cortesanos del imperio fallido de Maximiliano o sea obsoletamente, y cuya inteligencia máxima consiste en intentar la vieja estrategia compulsiva de capitalizar electoralmente un movimiento social emergente justo, que denuncia un abuso a todas luces criminal contra la vida, el derecho civil y los derechos humanos de los desplazados por una obra pública, no por un temblor ni por un huracán; por una orden del gobierno ejecutada con la misma cruel eficacia que un ejército extranjero de ocupación en nombre del progreso.
Un caso donde la peste de lo corrupto se cuela por las grietas de los pies de casa y por las patéticas bolsas de limosna insultante con que quieren simular la indemnización a las familias afectadas; tratadas peor que ganado.
El nombre de la exposición, como usted sabe, es una parodia de la famosa obra “México a Través de los Siglos”.
¿Habrá que abrir aquí una exposición equivalente que se llame “Sinaloa a Través de los Picachos”?
Ni modo, así las cosas, terminan diciendo los reporteros
Pensándolo bien... Como dice el Dr. House: Aquí "Todo mundo miente" .
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100310MéxicoPorCausas.docx; 11:56; 2737Car.
No obstante, “aunque están evaluadas, no están bien representadas las causas de los conservadores y de la derecha”, apuntó el ensayista.
“Sí hay referencias visuales al fallido imperio de Maximiliano, algunas fotografías del movimiento cristero, un pequeño nicho dedicado al padre Pro; pero no hay fotos de las cruzadas anticomunistas, las andanadas contra el libro de texto gratuito, ni de las quemas de material pornográfico, ni de la terquedad democrática del PAN en las décadas de 1940 y 1950, ni de las campañas de odio (del Sinarquismo) en el Bajío.
“Tampoco están representadas las causas de la sociedad civil de estos años, ni los esfuerzos cada vez más poderosos del empoderamiento, este nuevo término de eficacia tan probada en el país entero, ni está desplegado como se debe el impulso de los movimientos regionales, aunque sí se integra una intervención artística en uno de los muros del museo, dedicada al movimiento con un inicio extraordinario: la APPO en Oaxaca.”
Destacó que pese a que “hoy día la desigualdad afecta a todos de la misma manera que en 1910, y que es mucho más advertida, la mirada de los que están en la cumbre, por así decirlo, continúa siendo indiferente y a ratos patética en su deseo de que no exista o desaparezca la pobreza. La desigualdad es la gran semejanza a lo largo de todos estos años.
“No hay los indicios –añadió– de una gran revolución, pero hay un empoderamiento social como nunca se había visto y que sigue creciendo. Y aunque todavía no se va a manifestar como sería deseable en el aspecto electoral, sí está resistiendo en muchas partes.” [Carlos Paul, La Jornada, 2010-03-10]
Aquí en Sinaloa, sin ir tan lejos, como muestra basta un Picacho: una causa imposible más, cuya solución está en manos de políticos de lento aprendizaje (aunque parezca pleonasmo), quienes se comportan como sumisos cortesanos del imperio fallido de Maximiliano o sea obsoletamente, y cuya inteligencia máxima consiste en intentar la vieja estrategia compulsiva de capitalizar electoralmente un movimiento social emergente justo, que denuncia un abuso a todas luces criminal contra la vida, el derecho civil y los derechos humanos de los desplazados por una obra pública, no por un temblor ni por un huracán; por una orden del gobierno ejecutada con la misma cruel eficacia que un ejército extranjero de ocupación en nombre del progreso.
Un caso donde la peste de lo corrupto se cuela por las grietas de los pies de casa y por las patéticas bolsas de limosna insultante con que quieren simular la indemnización a las familias afectadas; tratadas peor que ganado.
El nombre de la exposición, como usted sabe, es una parodia de la famosa obra “México a Través de los Siglos”.
¿Habrá que abrir aquí una exposición equivalente que se llame “Sinaloa a Través de los Picachos”?
Ni modo, así las cosas, terminan diciendo los reporteros
Pensándolo bien... Como dice el Dr. House: Aquí "Todo mundo miente" .
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100310MéxicoPorCausas.docx; 11:56; 2737Car.
martes, 9 de marzo de 2010
Derechos castrados - 9 MZO 10
El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos calificó como un retroceso la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que limita facultades a los organismos defensores de los derechos humanos (DH) en el país.
"Las comisiones no podemos impugnar aquellas leyes que contravengan alguna disposición de DH PLASMADAS EN TRATADOS INTERNACIONALES; y lo que se ha planteado sobre todo en materia internacional, es que como todos somos testigos, las fronteras en DH se rompen(?)", explicó Juan José Ríos Estavillo. [Línea Directa Portal, 2010-03-09]
Esta limitación al funcionamiento legal de las Comisiones de DH es el equivalente moral social de disolver al Congreso desde cualquiera de los otros dos poderes, el Ejecutivo o el Judicial. Se necesita una justificación concreta, que aquí no existe.
El espíritu central de los DH desde su nacimiento fue la protección de ciudadanos individuales contra los abusos del Estado (especialmente el Estado fascista o fascistoide); posteriormente se concibieron los derechos humanos de segunda generación que incluyeron la protección de los ciudadanos como grupo social (Salud, Educación, Seguridad Social) contra el inclumplimiento y el abuso del Estado nacional; y finalmente los DH de tercera generación que protegen al medio ambiente como fuente de vida de la especie humana, contra la sobreexplotación o la destrucción por parte de quien sea, con permiso del Estado.
Si usted se fija bien, DH está ahí para que el Estado y su Ley Nacional no permitan el abuso o daño a ninguna de esas instancias individuales, regionales o globales, además e independientemente de los derechos civiles del Estado que sea.
Decir que los DH mexicanos solo valen si se basan en los Derechos Civiles nacionales es anular la acción de los DH que hay en el mundo para defender a los ciudadanos, es desconocer por decreto los acuerdos internacionales firmados que obligan supraconstitucionalmente al estado mexicano a obedecerlos; y es abandonar a la buena de Dios, a la voluntad del Ejército, de las Policías y los jueces mexicanos la vida y la libertad de los mexicanos. Es como decir que no hay derecho infantil por encima de la patria potestad de un niño golpeado por su padre.
Der por sí, las Comisiones de DH humanos mexicanas desde su origen gubernamental no pueden ver casos que estén en el terreno del ejército ni del Poder Judicial; que ahora no puedan apelar a instancias internacionales, que son a las únicas que respetarían así fuera negligentemente las autoridades abusivas, es una verdadera castración al derecho global.
POr supuesto, eso no cuenta para usted que tiene dinero para pagar la corrupción que le compra un trato privilegiado, desde la mordida del policía de tránsito hasta la del gordo y rico magistrado de la Suprema Corte; es solo para los pobres.
¿Y así quieren estos políticos que salga uno a hacer colas para conseguir una credencial de elector para poder votar por ellos?
Nos hemos convertido en un pueblo abusado, secuestrado, aterrorizado y abusado hasta la ignominia y sin vergüenza alguna por el estado mexicano a todos sus niveles.
Pensándolo bien... Sí, da coraje. Por eso lo tengo que decir decentemente a estos hijos de la chipoxta moxtla...
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100309DerechosHum.docx; 12:37; 2693car.
"Las comisiones no podemos impugnar aquellas leyes que contravengan alguna disposición de DH PLASMADAS EN TRATADOS INTERNACIONALES; y lo que se ha planteado sobre todo en materia internacional, es que como todos somos testigos, las fronteras en DH se rompen(?)", explicó Juan José Ríos Estavillo. [Línea Directa Portal, 2010-03-09]
Esta limitación al funcionamiento legal de las Comisiones de DH es el equivalente moral social de disolver al Congreso desde cualquiera de los otros dos poderes, el Ejecutivo o el Judicial. Se necesita una justificación concreta, que aquí no existe.
El espíritu central de los DH desde su nacimiento fue la protección de ciudadanos individuales contra los abusos del Estado (especialmente el Estado fascista o fascistoide); posteriormente se concibieron los derechos humanos de segunda generación que incluyeron la protección de los ciudadanos como grupo social (Salud, Educación, Seguridad Social) contra el inclumplimiento y el abuso del Estado nacional; y finalmente los DH de tercera generación que protegen al medio ambiente como fuente de vida de la especie humana, contra la sobreexplotación o la destrucción por parte de quien sea, con permiso del Estado.
Si usted se fija bien, DH está ahí para que el Estado y su Ley Nacional no permitan el abuso o daño a ninguna de esas instancias individuales, regionales o globales, además e independientemente de los derechos civiles del Estado que sea.
Decir que los DH mexicanos solo valen si se basan en los Derechos Civiles nacionales es anular la acción de los DH que hay en el mundo para defender a los ciudadanos, es desconocer por decreto los acuerdos internacionales firmados que obligan supraconstitucionalmente al estado mexicano a obedecerlos; y es abandonar a la buena de Dios, a la voluntad del Ejército, de las Policías y los jueces mexicanos la vida y la libertad de los mexicanos. Es como decir que no hay derecho infantil por encima de la patria potestad de un niño golpeado por su padre.
Der por sí, las Comisiones de DH humanos mexicanas desde su origen gubernamental no pueden ver casos que estén en el terreno del ejército ni del Poder Judicial; que ahora no puedan apelar a instancias internacionales, que son a las únicas que respetarían así fuera negligentemente las autoridades abusivas, es una verdadera castración al derecho global.
POr supuesto, eso no cuenta para usted que tiene dinero para pagar la corrupción que le compra un trato privilegiado, desde la mordida del policía de tránsito hasta la del gordo y rico magistrado de la Suprema Corte; es solo para los pobres.
¿Y así quieren estos políticos que salga uno a hacer colas para conseguir una credencial de elector para poder votar por ellos?
Nos hemos convertido en un pueblo abusado, secuestrado, aterrorizado y abusado hasta la ignominia y sin vergüenza alguna por el estado mexicano a todos sus niveles.
Pensándolo bien... Sí, da coraje. Por eso lo tengo que decir decentemente a estos hijos de la chipoxta moxtla...
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100309DerechosHum.docx; 12:37; 2693car.
Mujeres - 8 MZO 10
En el llamado Día Internacional de la Mujer, la prensa del globo (como siempre despistada) no dice nada al respecto. Pero la prensa y el status mexicano salen al público a dedicarles homenajes que empiezan a amenazar seriamente con destronar al 10 de mayo.
Las mujeres son la mayoría de los seres humanos sobre la tierra. Y que haya un “día de la mujer” y no haya un “día del hombre” es un síntoma que se delata por sí mismo.
La mujer ha recorrido un largo camino en la historia bajo la hegemonía masculina. El patriarcado es la marca cultural de las formaciones sociales; pero el género femenino ha contribuido (obviamente de manera inconsciente) a su perpetuación, mediante el desarrollo de sus críos machos como un género “fuerte” destinado a dominar, y a sus críos hembras como un género “débil” fatalmente dominado.
Aún en el siglo 20, caracterizado por los incipientes movimientos políticos y culturales de emancipación femenina, los movimientos feministas siguen sin tocar seriamente el terreno del desarrollo infantil de los géneros. Y desconocer las diferencias psicosexuales del desarrollo entre las mujeres y los hombres, ya sea por una negación táctica o política, sea por decreto o por simple ignorancia, ha propiciado que la mujer no aprenda muchas cosas sobre sí misma que la pondrían en una clara posición NO-simulada de equidad social, cultural, psíquica y biológica frente al hombre.
Las capacidades de la mujer para la supervivencia, para el aprendizaje, para enfrentar el dolor, su reconocimiento de la agresividad, de las limitaciones humanas y su capacidad sexual, son muy superiores a las masculinas.
Los hombres son excelentes investigadores científicos, teóricos y filósofos. Definitivamente el terreno del conocimiento ‘duro’ ha sido de los hombres; así como el del poder financiero, militar, político y obviamente todo lo que signifique dominio.
Pero la capacidad de amar de la mujer puede ser el futuro de la especie o, dicho de otro modo, puede lograr que la especie tenga futuro o no. Y esto es una realidad de facto, más que un falso intento de ‘amansar’ la justa ira del género femenino con canciones donde las llamen “mujeres divinas” (por favor...).
El género masculino NO lo ha hecho tan bien en los últimos 70 siglos de civilización. La supremacía del hombre parece una campaña publicitaria en las universidades, las publicaciones, los cines y la tele, diseñada para ocultar una realidad histórica fracasada.
¿Y ahora, para cerrar con broche de oro la era masculina, resulta que se ha creado un paternalista Año Internacional de la Mujer que auto-denuncia lo que pretende ocultar?
No, pues así “la defensa descansa”. [JPR, PB, 2000-03-08] (¡Hace 10 años!)
Pensándolo bien... Uy, ¿cómo hemos avanzado desde entonces, no?
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100308Mujer.docx ;11:58;2415Car.
Las mujeres son la mayoría de los seres humanos sobre la tierra. Y que haya un “día de la mujer” y no haya un “día del hombre” es un síntoma que se delata por sí mismo.
La mujer ha recorrido un largo camino en la historia bajo la hegemonía masculina. El patriarcado es la marca cultural de las formaciones sociales; pero el género femenino ha contribuido (obviamente de manera inconsciente) a su perpetuación, mediante el desarrollo de sus críos machos como un género “fuerte” destinado a dominar, y a sus críos hembras como un género “débil” fatalmente dominado.
Aún en el siglo 20, caracterizado por los incipientes movimientos políticos y culturales de emancipación femenina, los movimientos feministas siguen sin tocar seriamente el terreno del desarrollo infantil de los géneros. Y desconocer las diferencias psicosexuales del desarrollo entre las mujeres y los hombres, ya sea por una negación táctica o política, sea por decreto o por simple ignorancia, ha propiciado que la mujer no aprenda muchas cosas sobre sí misma que la pondrían en una clara posición NO-simulada de equidad social, cultural, psíquica y biológica frente al hombre.
Las capacidades de la mujer para la supervivencia, para el aprendizaje, para enfrentar el dolor, su reconocimiento de la agresividad, de las limitaciones humanas y su capacidad sexual, son muy superiores a las masculinas.
Los hombres son excelentes investigadores científicos, teóricos y filósofos. Definitivamente el terreno del conocimiento ‘duro’ ha sido de los hombres; así como el del poder financiero, militar, político y obviamente todo lo que signifique dominio.
Pero la capacidad de amar de la mujer puede ser el futuro de la especie o, dicho de otro modo, puede lograr que la especie tenga futuro o no. Y esto es una realidad de facto, más que un falso intento de ‘amansar’ la justa ira del género femenino con canciones donde las llamen “mujeres divinas” (por favor...).
El género masculino NO lo ha hecho tan bien en los últimos 70 siglos de civilización. La supremacía del hombre parece una campaña publicitaria en las universidades, las publicaciones, los cines y la tele, diseñada para ocultar una realidad histórica fracasada.
¿Y ahora, para cerrar con broche de oro la era masculina, resulta que se ha creado un paternalista Año Internacional de la Mujer que auto-denuncia lo que pretende ocultar?
No, pues así “la defensa descansa”. [JPR, PB, 2000-03-08] (¡Hace 10 años!)
Pensándolo bien... Uy, ¿cómo hemos avanzado desde entonces, no?
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100308Mujer.docx ;11:58;2415Car.
lunes, 8 de marzo de 2010
Maternidad Perfecta VC - 6 MZO 10
Ella lo planeó todo desde que eran novios.
Al menos es lo que creía: que lo podía planear todo. Claro, que habría un cierto margen de error, ni que fuera tarada; pero era un buen plan para cuando estuvieran casados, ¿no?
La casa, la colonia donde vivirían, la escuela donde desde ahora metería sus solicitudes; una para el niño, en la escuela donde estuvo el papá y otra para la niña, donde estuvo mami, y así no andar a las carreras.
El seguro de estudios superiores en el banco, el seguro de vida de los dos papás, el seguro hospitalario para toda la familia.
¿Qué me falta?
La psicóloga, por supuesto; el curso de kumón, la maestra de inglés, natación, piano, Tae Kuan Do para la niña y Karate Do para el niño...
¿Cómo estarán los viajes de intercambio dentro de 14 años? ¿La India, Brasil o China? Bueno, como estén; hay que dejar un apartado para eso también.
Todo está fríamente calculado: estimulación temprana, jardín de niños moderno y de pocos alumnos; nada de andar escuchando consejos de los abuelos, no saben nada de nada, computadora desde el primer año de vida, una educadora contratada como baby sitter, una hora diaria de calidad maternal...
Ella lo planeó todo desde novios.
Ella y su pareja serían los padres que nunca tuvieron ninguno de los dos y que se la pasaron todo el noviazgo contándoselo el uno al otro como si fuera un concurso de “Quién Tuvo Los Peores Padres” o algo así. La realidad es que nunca se pudieron poner de acuerdo si era peor el alcoholismo violento del padre de uno o la depresión crónica y la hipocondria de la madre de la otra. Fue un empate.
Ella fue una excelente alumna en su escuela profesional, siempre becada por su alto rendimiento escolar que le mereció premios de su familia: viajes, autos, tarjetas de crédito...
Y llegó a formar una familia con un excelente sentido del orden y la disciplina, de lo que debe ser y hacer una madre perfecta.
Sólo faltó una sola consideración: Los hijos no son motocicletas, no son un Nintendo, no son computadoras;los niños son primero animalitos de Dios y después se hacen animales superiores que rápidamente se convierten en seres racionales, hablantes e inter-actuantes.
Pero no sólo eso, también se transforman en una especie de seres extraterrestres que aprenden de su madre TODO; incluyendo lo que la madre NO les quieren mostrar de sí.
Los niños ven a sus mamás como si fueran transparentes, como si su inconsciente se asomara por los poros de la piel que los amamanta o como si sus deseos escondidos salieran de los patrones acústicos de la voz que los educa; como si el lenguaje no verbal de la madre les estuviera diciendo, por un megáfono de vendedor de naranjas “hasta la puerta de su casa”, infinidad de cosas que las madres no dicen por el habla, pero que el niño aprende por aproximaciones sucesivas al misterioso lenguaje del cuerpo.
O sea, el niño no sólo cumplirá con el deseo manifiesto de la madre, sino también con el deseo latente; el oculto, el que nunca imaginó que podría ser aprendido por el hijo.
Y es entonces cuando el proyecto de perfección de la madre se colapsa como bolsa de valores desinflada, unos 15 años después de nacido el bebé.
¿Qué persigue la maternidad perfecta? ¿Qué desea que sea su hijo esa madre?
La perfección del método es lo único que ha cambiado aquí. O sea, el uso de los recursos sociales, culturales y mercantiles para satisfacer el deseo de que el hijo sea lo que yo no fui, es lo que aparenta una perfección dedicada, con todo lo que hay, a lograr lo imposible: moldear la personalidad y el éxito de mi hijo.
Una perfección obviamente destinada al fracaso.
Lo que no ha cambiado es el deseo de que mi hijo sea lo mejor que ha aparecido sobre la superficie del planeta, desde hace miles de años.
Eso siempre ha estado ahí; que mi descendencia tenga lo que yo no tuve, sepa lo que yo no supe, logre lo que yo no logré en el campo en el que yo me desenvuelvo, satisfacer mis deseos no cumplidos.
Entonces yo, como madre, tengo que actuar como la madre ideal que traigo en el fondo de mí misma, y que llenará los huecos, los pendientes, que mi pobre madre, por ignorante o por maleta, no pudo satisfacer. Yo seré para mi hijo o hija la madre que siempre quise tener y que nunca tuve.
Desde ahorita ya sabe usted en qué terminará esa telenovela.
No se logrará el propósito, el hijo le saldrá a su madre como todos los hijos han salido por los siglos de los siglos: de otro modo cualquiera, para bien o para mal, pero no como la madre deseaba que saliera.
Si sale mejor o peor es por razones ajenas al deseo materno; y su modo de ser siempre viene acompañado con otras cosas que la madre nunca previó; por ejemplo, salen alcohólicos, salen gay, comunistas, ateos, sexo-servidoras, divorciados, decoradores, narcos, ricos políticos corruptos, o peor aún: pobres políticos NO-corruptos…
Usted puede imaginar más ejemplos que estos.
De lo que aquí hablamos es de la historia que hay detrás del perfeccionismo de la madre y de lo que se oculta en tal perfección, que es lo que lo convierte en un proyecto fallido, imperfecto.
En primer lugar, la idea misma de perfección, se reconozca o no, trabaja contra natura. La naturaleza no conoce la perfección aunque el espectáculo de la naturaleza indudablemente da momentos que bien podrían considerarse perfectos, como un ocaso enrojecido sobre la raya del horizonte marino, una cascada en medio de la selva, la visión de la nieve nueva o el paisaje del valle desde la cima de una montaña, los documentales sobre la ternura maternal de las fieras, el comportamiento sincronizado de las especies masivas, como el nado de algunos cardúmenes o el vuelo de pájaros migrantes… puede usted agregar más ejemplos.
Pero la naturaleza es fallida, imperfecta. Indudablemente es evolutiva y buscadora de unidades cada vez más amplias y complejas, pero lejos de la perfección. Y, con todo respeto, sentimos recordar que la especie humana también es parte de esa naturaleza. Podrá ser la punta de flecha de su evolución, pero aún así es parte del reino animal.
¿Por qué entonces, si sabemos bien que tal perfección es imposible aquí y ahora, la buscamos en el acto de la crianza y la educación de la siguiente especie, como si fuera una mutación?
Las fantasías de omnipotencia en la mente humana están ahí desde el narcisismo primitivo del bebé que alucina el pecho materno por hambre y succiona al aire; la madre lo ve y le da de mamar, pero el bebé le atribuye a su alucinación a SU poder de hacer aparecer el pecho que satisfará su hambre. Claro, tal especie de locura desaparecerá pronto bajo el principio de realidad, que le mostrará al niño que la mama y la mamá no son extensiones de su cuerpo sino una parte o el todo de otro ser humano ajeno a su poder.
Pero eso no evitará que los brotes y apariciones del pensamiento mágico lo acompañen por toda la vida, a pesar de las lecciones de la realidad concreta o de la escuela que le muestran el pensamiento racional.
Lo mágico y lo racional conviven en el ser humano desde el día uno hasta el último; y tal vez de su mezcla hayan salido las mejores creaciones del arte y los mejores inventos de la ciencia; pero cuando una de estas actividades humanas se impone a la fuerza sobre la otra, algo pasa que ya no funciona bien. Y falla.
Cuando reprimimos la fantasía o negamos a la razón, algo pasa que la realidad ya no obedece a nuestros deseos. O si lo quiere ver al revés: nosotros dejamos de actuar en sincronía, sinfonía, armonía con la realidad. Dejamos de reconocerla y respetarla.
En realidad, la realidad nunca obedeció, ni obedece, ni obedecerá a nuestros deseos. La realidad es indiferente a los deseos o fantasías individuales. Ya estaba ahí antes de que naciéramos y estará ahí después de la hora de nuestra muerte amén.
Desear que mi hijo sea la mejor creación del planeta es un deseo totalmente legítimo y si me presiona un poco, es inevitable; siempre está ahí a pesar de que a algunos les dé pena, mi hijo es un genio y mi hija la más hermosa del mundo. Cero discusiones.
Pero eso deja de tener sentido cuando implanto un proyecto de apoyo instrumentado para lograr que se cumpla ese deseo de manera perfecta.
Incluso cuando me digo, “Claro que no creo que sea perfecto, ni que fuera idiota, es sólo para generar las condiciones propicias para el desarrollo de sus facultades; ¡ni modo que no haga uno nada por el crecimiento de sus críos!”, aún ahí me estoy engañando con una razón adecuada que oculta el deseo obsesivo de que todo camine bajo control, como relojito.
Pero el calendario de la naturaleza tiene varias sorpresas, entre ellas la adolescencia, cuando toda la fábrica de educación y disciplina de la niñez se vuelve obsoleta, y las ideas de los padres pasan a ser francamente tontas, necias y obsoletas a los ojos de los hijos.
Son padres obsesivos con el orden y con el rendimiento escolar; descendientes de una moral que niega sus conflictos internos, pero que los hijos perciben cada vez con mayor claridad, desmitificando con la simple observación de los hechos aquello que sale por la boca de su madre; de una madre perfecta.
Y si el proyecto llega a triunfar, a como dé lugar y haya sido como haya sido, y se logra un hijo que haga todo lo que la mamá quería que hiciera y dijera al pie de la letra, la mamá se dará cuenta tardíamente que en el interior de ese autómata reproductor de la mezcla de lo que los dos padres nunca pudieron ser, no hay nada, está vacío en su interior; no hay un YO que le pertenezca al hijo, sólo hay un TÚ que le pertenece a la mamá.
(Le dije que usted ya sabía en qué terminaría esta telenovela).
¿Entonces qué tengo que hacer? ¿Qué hago?
El método tradicional es criar a los hijos como se han criado durante todos los siglos: dejando fluir a la naturaleza, contemplar el desarrollo y vigilarlo de cerca, pero sin intentar refabricar lo que la naturaleza ya fabricó desde lo genético por sí sola; y que lo sigue construyendo ahorita mismo mientras su hijo interactúa con usted sin que usted esté enterada de todo lo que se mueve ahí.
Porque lo que se interactúa es mucho más que lo que usted piensa, es inconsciente y tiene qué aceptar que usted no tiene el control consciente sobre una buena parte de esas interacciones con sus hijos.
Un serio golpe al narcisismo, al Ego o al perfeccionismo.
Para eso, es necesaria una cierta humildad científica de su parte, una cierta capacidad para aceptar esa ignorancia sobre el método perfecto de educación de mis hijos. Y un reconocimiento de que, si lo que pretendo con mis hijos es compensar lo que yo no tuve, no hay nada de malo en ello; pero si sólo eso mueve mi intención educadora, estaré muy lejos de lo que mi hijo necesita para su mejor desarrollo.
Estaré simplificando y reduciendo su desarrollo así como yo reduzco mi interés a la satisfacción de mis propias carencias afectivas infantiles usando a mis hijos o a mi pareja para ello.
Tal vez en el futuro habrá qué ver si ese USO de los hijos no constituirá un verdadero ABUSO infantil.
De alguna manera debo darme cuenta, como madre, de que no es mi voluntad directa la que formará a mis hijos, sino que es un complejo de interacciones afectivas familiares, diferentes en tiempo y espacio para cada uno de ellos; esto lo logrará mucho mejor que mis disciplinas o mis ansiedades.
Hace menos daño la aparente negligencia de las madres ignorantes de las clases más pobres, que la preocupación obsesiva y deformante de las madres perfectas de las clases más ricas o las que simulan serlo.
No es llevando al niño al psicólogo donde está la solución del problema, eso sólo es un curita, una aspirina. No hay nada de malo en que el niño vea al psicólogo infantil; pero usted, o ambos en pareja como adultos, si ven a un psicólogo de adultos, su niño saldrá mucho más beneficiado con ello.
A la mitad del camino, fuera de los extremos que de todos modos nunca logran lo que pretenden, se encuentra una genuina preocupación por el desarrollo saludable de los niños, al construir un ambiente de actitudes afectivamente propicias, aunque no sean necesariamente efectivamente perfectas.
En todo caso, lo que funciona mucho mejor es una honestidad de fondo, una afectividad libre, por aleatoria e impredecible que sea; y un flujo de información lo más apegada a la honesta verdad que se pueda entre padres e hijos al transmitir el saber.
Responder a las preguntas de manera directa y honesta, aunque sean preguntas tabú, aunque se quiera proteger la inocencia infantil, si el infante no entiende la respuesta no se preocupe, la entenderá cuando sea más grande y vuelva a preguntar lo mismo. No importa el contenido, lo que importa es que el niño sepa, perciba, que su padre o su madre confía en él y en su razonamiento responsable.
Lo que al niño más le ayuda a crecer sanamente es estar seguro de que es amado, más que cualquier otra cosa.
Todo lo demás podrá estar bien o no, pero deberá estar supeditado a este principio básico del desarrollo infantil: “Aquí, en mi casa, yo soy amado por mi madre sin duda alguna; y cuando tengo alguna duda de nuevo, los hechos del día siguiente me demostrarán que me aman a pesar de mis equívocos y mis temores”.
De nuevo, el mejor amigo de la vida es el amor, así de imperfecto.
No hay madres perfectas; hay madres amorosas.
http://jperezrobles.spaces.live.com/
http://www.lineadirectaportal.com/
VC100306MaternidadPerf.docx; 12:30; 11035.
Al menos es lo que creía: que lo podía planear todo. Claro, que habría un cierto margen de error, ni que fuera tarada; pero era un buen plan para cuando estuvieran casados, ¿no?
La casa, la colonia donde vivirían, la escuela donde desde ahora metería sus solicitudes; una para el niño, en la escuela donde estuvo el papá y otra para la niña, donde estuvo mami, y así no andar a las carreras.
El seguro de estudios superiores en el banco, el seguro de vida de los dos papás, el seguro hospitalario para toda la familia.
¿Qué me falta?
La psicóloga, por supuesto; el curso de kumón, la maestra de inglés, natación, piano, Tae Kuan Do para la niña y Karate Do para el niño...
¿Cómo estarán los viajes de intercambio dentro de 14 años? ¿La India, Brasil o China? Bueno, como estén; hay que dejar un apartado para eso también.
Todo está fríamente calculado: estimulación temprana, jardín de niños moderno y de pocos alumnos; nada de andar escuchando consejos de los abuelos, no saben nada de nada, computadora desde el primer año de vida, una educadora contratada como baby sitter, una hora diaria de calidad maternal...
Ella lo planeó todo desde novios.
Ella y su pareja serían los padres que nunca tuvieron ninguno de los dos y que se la pasaron todo el noviazgo contándoselo el uno al otro como si fuera un concurso de “Quién Tuvo Los Peores Padres” o algo así. La realidad es que nunca se pudieron poner de acuerdo si era peor el alcoholismo violento del padre de uno o la depresión crónica y la hipocondria de la madre de la otra. Fue un empate.
Ella fue una excelente alumna en su escuela profesional, siempre becada por su alto rendimiento escolar que le mereció premios de su familia: viajes, autos, tarjetas de crédito...
Y llegó a formar una familia con un excelente sentido del orden y la disciplina, de lo que debe ser y hacer una madre perfecta.
Sólo faltó una sola consideración: Los hijos no son motocicletas, no son un Nintendo, no son computadoras;los niños son primero animalitos de Dios y después se hacen animales superiores que rápidamente se convierten en seres racionales, hablantes e inter-actuantes.
Pero no sólo eso, también se transforman en una especie de seres extraterrestres que aprenden de su madre TODO; incluyendo lo que la madre NO les quieren mostrar de sí.
Los niños ven a sus mamás como si fueran transparentes, como si su inconsciente se asomara por los poros de la piel que los amamanta o como si sus deseos escondidos salieran de los patrones acústicos de la voz que los educa; como si el lenguaje no verbal de la madre les estuviera diciendo, por un megáfono de vendedor de naranjas “hasta la puerta de su casa”, infinidad de cosas que las madres no dicen por el habla, pero que el niño aprende por aproximaciones sucesivas al misterioso lenguaje del cuerpo.
O sea, el niño no sólo cumplirá con el deseo manifiesto de la madre, sino también con el deseo latente; el oculto, el que nunca imaginó que podría ser aprendido por el hijo.
Y es entonces cuando el proyecto de perfección de la madre se colapsa como bolsa de valores desinflada, unos 15 años después de nacido el bebé.
¿Qué persigue la maternidad perfecta? ¿Qué desea que sea su hijo esa madre?
La perfección del método es lo único que ha cambiado aquí. O sea, el uso de los recursos sociales, culturales y mercantiles para satisfacer el deseo de que el hijo sea lo que yo no fui, es lo que aparenta una perfección dedicada, con todo lo que hay, a lograr lo imposible: moldear la personalidad y el éxito de mi hijo.
Una perfección obviamente destinada al fracaso.
Lo que no ha cambiado es el deseo de que mi hijo sea lo mejor que ha aparecido sobre la superficie del planeta, desde hace miles de años.
Eso siempre ha estado ahí; que mi descendencia tenga lo que yo no tuve, sepa lo que yo no supe, logre lo que yo no logré en el campo en el que yo me desenvuelvo, satisfacer mis deseos no cumplidos.
Entonces yo, como madre, tengo que actuar como la madre ideal que traigo en el fondo de mí misma, y que llenará los huecos, los pendientes, que mi pobre madre, por ignorante o por maleta, no pudo satisfacer. Yo seré para mi hijo o hija la madre que siempre quise tener y que nunca tuve.
Desde ahorita ya sabe usted en qué terminará esa telenovela.
No se logrará el propósito, el hijo le saldrá a su madre como todos los hijos han salido por los siglos de los siglos: de otro modo cualquiera, para bien o para mal, pero no como la madre deseaba que saliera.
Si sale mejor o peor es por razones ajenas al deseo materno; y su modo de ser siempre viene acompañado con otras cosas que la madre nunca previó; por ejemplo, salen alcohólicos, salen gay, comunistas, ateos, sexo-servidoras, divorciados, decoradores, narcos, ricos políticos corruptos, o peor aún: pobres políticos NO-corruptos…
Usted puede imaginar más ejemplos que estos.
De lo que aquí hablamos es de la historia que hay detrás del perfeccionismo de la madre y de lo que se oculta en tal perfección, que es lo que lo convierte en un proyecto fallido, imperfecto.
En primer lugar, la idea misma de perfección, se reconozca o no, trabaja contra natura. La naturaleza no conoce la perfección aunque el espectáculo de la naturaleza indudablemente da momentos que bien podrían considerarse perfectos, como un ocaso enrojecido sobre la raya del horizonte marino, una cascada en medio de la selva, la visión de la nieve nueva o el paisaje del valle desde la cima de una montaña, los documentales sobre la ternura maternal de las fieras, el comportamiento sincronizado de las especies masivas, como el nado de algunos cardúmenes o el vuelo de pájaros migrantes… puede usted agregar más ejemplos.
Pero la naturaleza es fallida, imperfecta. Indudablemente es evolutiva y buscadora de unidades cada vez más amplias y complejas, pero lejos de la perfección. Y, con todo respeto, sentimos recordar que la especie humana también es parte de esa naturaleza. Podrá ser la punta de flecha de su evolución, pero aún así es parte del reino animal.
¿Por qué entonces, si sabemos bien que tal perfección es imposible aquí y ahora, la buscamos en el acto de la crianza y la educación de la siguiente especie, como si fuera una mutación?
Las fantasías de omnipotencia en la mente humana están ahí desde el narcisismo primitivo del bebé que alucina el pecho materno por hambre y succiona al aire; la madre lo ve y le da de mamar, pero el bebé le atribuye a su alucinación a SU poder de hacer aparecer el pecho que satisfará su hambre. Claro, tal especie de locura desaparecerá pronto bajo el principio de realidad, que le mostrará al niño que la mama y la mamá no son extensiones de su cuerpo sino una parte o el todo de otro ser humano ajeno a su poder.
Pero eso no evitará que los brotes y apariciones del pensamiento mágico lo acompañen por toda la vida, a pesar de las lecciones de la realidad concreta o de la escuela que le muestran el pensamiento racional.
Lo mágico y lo racional conviven en el ser humano desde el día uno hasta el último; y tal vez de su mezcla hayan salido las mejores creaciones del arte y los mejores inventos de la ciencia; pero cuando una de estas actividades humanas se impone a la fuerza sobre la otra, algo pasa que ya no funciona bien. Y falla.
Cuando reprimimos la fantasía o negamos a la razón, algo pasa que la realidad ya no obedece a nuestros deseos. O si lo quiere ver al revés: nosotros dejamos de actuar en sincronía, sinfonía, armonía con la realidad. Dejamos de reconocerla y respetarla.
En realidad, la realidad nunca obedeció, ni obedece, ni obedecerá a nuestros deseos. La realidad es indiferente a los deseos o fantasías individuales. Ya estaba ahí antes de que naciéramos y estará ahí después de la hora de nuestra muerte amén.
Desear que mi hijo sea la mejor creación del planeta es un deseo totalmente legítimo y si me presiona un poco, es inevitable; siempre está ahí a pesar de que a algunos les dé pena, mi hijo es un genio y mi hija la más hermosa del mundo. Cero discusiones.
Pero eso deja de tener sentido cuando implanto un proyecto de apoyo instrumentado para lograr que se cumpla ese deseo de manera perfecta.
Incluso cuando me digo, “Claro que no creo que sea perfecto, ni que fuera idiota, es sólo para generar las condiciones propicias para el desarrollo de sus facultades; ¡ni modo que no haga uno nada por el crecimiento de sus críos!”, aún ahí me estoy engañando con una razón adecuada que oculta el deseo obsesivo de que todo camine bajo control, como relojito.
Pero el calendario de la naturaleza tiene varias sorpresas, entre ellas la adolescencia, cuando toda la fábrica de educación y disciplina de la niñez se vuelve obsoleta, y las ideas de los padres pasan a ser francamente tontas, necias y obsoletas a los ojos de los hijos.
Son padres obsesivos con el orden y con el rendimiento escolar; descendientes de una moral que niega sus conflictos internos, pero que los hijos perciben cada vez con mayor claridad, desmitificando con la simple observación de los hechos aquello que sale por la boca de su madre; de una madre perfecta.
Y si el proyecto llega a triunfar, a como dé lugar y haya sido como haya sido, y se logra un hijo que haga todo lo que la mamá quería que hiciera y dijera al pie de la letra, la mamá se dará cuenta tardíamente que en el interior de ese autómata reproductor de la mezcla de lo que los dos padres nunca pudieron ser, no hay nada, está vacío en su interior; no hay un YO que le pertenezca al hijo, sólo hay un TÚ que le pertenece a la mamá.
(Le dije que usted ya sabía en qué terminaría esta telenovela).
¿Entonces qué tengo que hacer? ¿Qué hago?
El método tradicional es criar a los hijos como se han criado durante todos los siglos: dejando fluir a la naturaleza, contemplar el desarrollo y vigilarlo de cerca, pero sin intentar refabricar lo que la naturaleza ya fabricó desde lo genético por sí sola; y que lo sigue construyendo ahorita mismo mientras su hijo interactúa con usted sin que usted esté enterada de todo lo que se mueve ahí.
Porque lo que se interactúa es mucho más que lo que usted piensa, es inconsciente y tiene qué aceptar que usted no tiene el control consciente sobre una buena parte de esas interacciones con sus hijos.
Un serio golpe al narcisismo, al Ego o al perfeccionismo.
Para eso, es necesaria una cierta humildad científica de su parte, una cierta capacidad para aceptar esa ignorancia sobre el método perfecto de educación de mis hijos. Y un reconocimiento de que, si lo que pretendo con mis hijos es compensar lo que yo no tuve, no hay nada de malo en ello; pero si sólo eso mueve mi intención educadora, estaré muy lejos de lo que mi hijo necesita para su mejor desarrollo.
Estaré simplificando y reduciendo su desarrollo así como yo reduzco mi interés a la satisfacción de mis propias carencias afectivas infantiles usando a mis hijos o a mi pareja para ello.
Tal vez en el futuro habrá qué ver si ese USO de los hijos no constituirá un verdadero ABUSO infantil.
De alguna manera debo darme cuenta, como madre, de que no es mi voluntad directa la que formará a mis hijos, sino que es un complejo de interacciones afectivas familiares, diferentes en tiempo y espacio para cada uno de ellos; esto lo logrará mucho mejor que mis disciplinas o mis ansiedades.
Hace menos daño la aparente negligencia de las madres ignorantes de las clases más pobres, que la preocupación obsesiva y deformante de las madres perfectas de las clases más ricas o las que simulan serlo.
No es llevando al niño al psicólogo donde está la solución del problema, eso sólo es un curita, una aspirina. No hay nada de malo en que el niño vea al psicólogo infantil; pero usted, o ambos en pareja como adultos, si ven a un psicólogo de adultos, su niño saldrá mucho más beneficiado con ello.
A la mitad del camino, fuera de los extremos que de todos modos nunca logran lo que pretenden, se encuentra una genuina preocupación por el desarrollo saludable de los niños, al construir un ambiente de actitudes afectivamente propicias, aunque no sean necesariamente efectivamente perfectas.
En todo caso, lo que funciona mucho mejor es una honestidad de fondo, una afectividad libre, por aleatoria e impredecible que sea; y un flujo de información lo más apegada a la honesta verdad que se pueda entre padres e hijos al transmitir el saber.
Responder a las preguntas de manera directa y honesta, aunque sean preguntas tabú, aunque se quiera proteger la inocencia infantil, si el infante no entiende la respuesta no se preocupe, la entenderá cuando sea más grande y vuelva a preguntar lo mismo. No importa el contenido, lo que importa es que el niño sepa, perciba, que su padre o su madre confía en él y en su razonamiento responsable.
Lo que al niño más le ayuda a crecer sanamente es estar seguro de que es amado, más que cualquier otra cosa.
Todo lo demás podrá estar bien o no, pero deberá estar supeditado a este principio básico del desarrollo infantil: “Aquí, en mi casa, yo soy amado por mi madre sin duda alguna; y cuando tengo alguna duda de nuevo, los hechos del día siguiente me demostrarán que me aman a pesar de mis equívocos y mis temores”.
De nuevo, el mejor amigo de la vida es el amor, así de imperfecto.
No hay madres perfectas; hay madres amorosas.
http://jperezrobles.spaces.live.com/
http://www.lineadirectaportal.com/
VC100306MaternidadPerf.docx; 12:30; 11035.
jueves, 4 de marzo de 2010
Ratzinger - 4 MZO 10
El Papa Benedicto XVI no descansará hasta borrar de los anales de la iglesia el pasaje de Marcial Maciel y todo lo que esté relacionado con él; y si ha de incluir para ello a los Legionarios de Cristo, todo parece indicar que lo hará.
Ha sido algo que él había detectado como insostenible; no solo pecaminoso, si fuera eso tendría que ser perdonado por la iglesia en nombre de Cristo y ya, como todos los pecados de cualquier ser humano capaz de arrepentirse en vida o cuando muera; sino como una mancha perversa que perturba hasta el hueso del canon católico romano.
No cualquiera puede ser líder de una organización religiosa, como un monasterio, como la curia, como un obispado, como los grupos de apoyo económico o social de la iglesia. Para Ratzinger, tiene que ser alguien que sea como San Pablo, a quien respeta notablemente en sus admoniciones inspiradas en las epístolas paulinas.
Pero no solo eso, que sería más que suficiente; desde antes de ser el Papa Benedicto XVI, cuando el teólogo Ratzinger era el segundo de a bordo del Papa Juan Pablo II, nunca estuvo de acuerdo con defender o proteger a Maciel contra las denuncias y demandas a las que se vio sujeto en vida por su aberrante adicción pederasta (y para otros, por su obvia megalomanía de poder en paroxismo), pero se disciplinó al ‘consenso’ Vaticano.
Eso terminó en el momento que asumió ser el Vicario de Cristo en la Tierra y el símil de San Pedro y San Pablo.
Su teología es ortodoxa, y ni la teología de la liberación y mucho menos la teología crítica de Hans Küng quien fue su compañero de estudios y luego su rival académico, fueron permitidas en las universidades y seminarios católicos del mundo cuando Ratzinger era un funcionario del Vaticano.
Ahora el mismo Küng, luego de atender a una graciosa invitación de Benedicto XVI, dijo que probablemente el Papa logre la verdadera renovación de la Iglesia, después de su dogmatismo como cardenal.
Y si en algo ha sido congruente Benedicto XVI, a pesar de la parsimonia a la que obliga el enorme poder económico de Legionarios de Cristo, es que las investigaciones y pruebas sobre la improcedencia de Maciel continuarán hasta que todo lo que representó en la iglesia desaparezca.
Y si eso incluye a Legionarios de Cristo insitución...
Parece ser que Benedicto XVI piensa que el daño que le haría a la iglesia no reconocerlo sería mayor que el que le haría reconocerlo; e incluso incluir de nuevo en los concilios futuros la discusión de si el voto de castidad puede ser voluntario y no obligatorio, como lo recomendaba San Pablo (“Más vale casarse que quemarse”).
Hans Küng, como Pierre Theilard de Chardin y otros teólogos católicos críticos, fue amablemente expulsado de la academia universitaria por cuestionar teológicamente la infalibilidad papal.
Hoy el Papa no es infalible y sin embargo la tierra se mueve.
Pensándolo bien... ¿Revisará la Iglesia Católica lo que es ‘contra natura’ y lo que no lo es, así sea más de mil años después?
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100304Ratzinger.docx; 16:38; 2556Car
Ha sido algo que él había detectado como insostenible; no solo pecaminoso, si fuera eso tendría que ser perdonado por la iglesia en nombre de Cristo y ya, como todos los pecados de cualquier ser humano capaz de arrepentirse en vida o cuando muera; sino como una mancha perversa que perturba hasta el hueso del canon católico romano.
No cualquiera puede ser líder de una organización religiosa, como un monasterio, como la curia, como un obispado, como los grupos de apoyo económico o social de la iglesia. Para Ratzinger, tiene que ser alguien que sea como San Pablo, a quien respeta notablemente en sus admoniciones inspiradas en las epístolas paulinas.
Pero no solo eso, que sería más que suficiente; desde antes de ser el Papa Benedicto XVI, cuando el teólogo Ratzinger era el segundo de a bordo del Papa Juan Pablo II, nunca estuvo de acuerdo con defender o proteger a Maciel contra las denuncias y demandas a las que se vio sujeto en vida por su aberrante adicción pederasta (y para otros, por su obvia megalomanía de poder en paroxismo), pero se disciplinó al ‘consenso’ Vaticano.
Eso terminó en el momento que asumió ser el Vicario de Cristo en la Tierra y el símil de San Pedro y San Pablo.
Su teología es ortodoxa, y ni la teología de la liberación y mucho menos la teología crítica de Hans Küng quien fue su compañero de estudios y luego su rival académico, fueron permitidas en las universidades y seminarios católicos del mundo cuando Ratzinger era un funcionario del Vaticano.
Ahora el mismo Küng, luego de atender a una graciosa invitación de Benedicto XVI, dijo que probablemente el Papa logre la verdadera renovación de la Iglesia, después de su dogmatismo como cardenal.
Y si en algo ha sido congruente Benedicto XVI, a pesar de la parsimonia a la que obliga el enorme poder económico de Legionarios de Cristo, es que las investigaciones y pruebas sobre la improcedencia de Maciel continuarán hasta que todo lo que representó en la iglesia desaparezca.
Y si eso incluye a Legionarios de Cristo insitución...
Parece ser que Benedicto XVI piensa que el daño que le haría a la iglesia no reconocerlo sería mayor que el que le haría reconocerlo; e incluso incluir de nuevo en los concilios futuros la discusión de si el voto de castidad puede ser voluntario y no obligatorio, como lo recomendaba San Pablo (“Más vale casarse que quemarse”).
Hans Küng, como Pierre Theilard de Chardin y otros teólogos católicos críticos, fue amablemente expulsado de la academia universitaria por cuestionar teológicamente la infalibilidad papal.
Hoy el Papa no es infalible y sin embargo la tierra se mueve.
Pensándolo bien... ¿Revisará la Iglesia Católica lo que es ‘contra natura’ y lo que no lo es, así sea más de mil años después?
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100304Ratzinger.docx; 16:38; 2556Car
miércoles, 3 de marzo de 2010
Narcoeditorial - 3 MZO 10
Las drogas ilegales son, como cualquier producto, un negocio. Uno muy bueno. La ONU calculó en 2005 las ganancias del narcotráfico en 400 mil millones de dólares. Datos más actualizados hablan de hasta 800 mil, 15% del comercio mundial. En términos generales, esa industria ha crecido en la misma proporción que las políticas restrictivas en su contra. México no escapa a esa contradicción: la prueba está en que, con todo y soldados en las calles, las mafias pueden ofrecer “tachas” a 25 pesos en las tienditas de la esquina.
Los defensores del prohibicionismo responden argumentando que hacen falta mejores policías, más tecnología, más dinero, nuevas leyes, mayor cooperación internacional, etc. Pero si analizamos el problema desde una perspectiva económica, es lógico su fracaso. Así paso con el alcohol cuando estaba prohibida su venta.
Normalmente, el precio de un artículo se determina según la cantidad de personas que buscan comprarlo en relación al costo de producirlo. En una economía de libre mercado se logra un equilibrio entre ambos cuando hay varias empresas que ofrecen lo mismo, lo cual permite a las personas elegir la mejor opción. En teoría, al cortar el suministro de droga el costo de producirla y difundirla sería tan alto que se volvería inaccesible para la gente comprarla. Sin embargo, en la realidad eso no ha sucedido ni en México ni en el resto del mundo.
El precio de las drogas ha subido, pero a un nivel en que los narcotraficantes siguen aumentando sus ganancias. Como consecuencia, logran comprar armas, corrupción y tecnología para la elaboración de productos más baratos. Ni los daños por productos alterados ni la prohibición le están quitando un ápice de compradores a los cárteles porque los adictos aumentan.
En sentido contrario, al despenalizar la droga bajaría su precio, como consecuencia bajarían los ingresos de los criminales, los cuales ya no podrían costear a sus organizaciones. A partir de ahí, las fuerzas de seguridad del Estado, en lugar de decomisar cargamentos, estarían enfocadas en proteger a la población de secuestros, extorsiones, y otros delitos más lesivos. Mientras los recursos, en vez de centrarse en las armas y los policías, se dedicarían a la prevención y la rehabilitación.
Aunque EU sabe lo anterior, por cuestiones políticas sigue dedicando 70% del presupuesto a prohibir y sólo 30% a reducir la demanda. Esa política se copió, incluso en proporciones mayores, en México. El día en que la fórmula se invierta, los cárteles pasarán a la historia. [Editorial, El Universal, 2010-03-03]
Este descarado refrito es obligado: Como nuestros argumentos locales sobre el narco han sido desde hace más de 10 años inútiles prédicas en el desierto, tal vez las opiniones editoriales nacionales, más objetivas, sirvan de algo.
Pensándolo bien... Como dicen los políticos corruptos agarrados en la movida: Me declaro totalmente ajeno a este editorial, aunque parezca escrito por mí...
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100303NarcoEditorial.docx; 12:46; 2675Car.
Los defensores del prohibicionismo responden argumentando que hacen falta mejores policías, más tecnología, más dinero, nuevas leyes, mayor cooperación internacional, etc. Pero si analizamos el problema desde una perspectiva económica, es lógico su fracaso. Así paso con el alcohol cuando estaba prohibida su venta.
Normalmente, el precio de un artículo se determina según la cantidad de personas que buscan comprarlo en relación al costo de producirlo. En una economía de libre mercado se logra un equilibrio entre ambos cuando hay varias empresas que ofrecen lo mismo, lo cual permite a las personas elegir la mejor opción. En teoría, al cortar el suministro de droga el costo de producirla y difundirla sería tan alto que se volvería inaccesible para la gente comprarla. Sin embargo, en la realidad eso no ha sucedido ni en México ni en el resto del mundo.
El precio de las drogas ha subido, pero a un nivel en que los narcotraficantes siguen aumentando sus ganancias. Como consecuencia, logran comprar armas, corrupción y tecnología para la elaboración de productos más baratos. Ni los daños por productos alterados ni la prohibición le están quitando un ápice de compradores a los cárteles porque los adictos aumentan.
En sentido contrario, al despenalizar la droga bajaría su precio, como consecuencia bajarían los ingresos de los criminales, los cuales ya no podrían costear a sus organizaciones. A partir de ahí, las fuerzas de seguridad del Estado, en lugar de decomisar cargamentos, estarían enfocadas en proteger a la población de secuestros, extorsiones, y otros delitos más lesivos. Mientras los recursos, en vez de centrarse en las armas y los policías, se dedicarían a la prevención y la rehabilitación.
Aunque EU sabe lo anterior, por cuestiones políticas sigue dedicando 70% del presupuesto a prohibir y sólo 30% a reducir la demanda. Esa política se copió, incluso en proporciones mayores, en México. El día en que la fórmula se invierta, los cárteles pasarán a la historia. [Editorial, El Universal, 2010-03-03]
Este descarado refrito es obligado: Como nuestros argumentos locales sobre el narco han sido desde hace más de 10 años inútiles prédicas en el desierto, tal vez las opiniones editoriales nacionales, más objetivas, sirvan de algo.
Pensándolo bien... Como dicen los políticos corruptos agarrados en la movida: Me declaro totalmente ajeno a este editorial, aunque parezca escrito por mí...
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100303NarcoEditorial.docx; 12:46; 2675Car.
martes, 2 de marzo de 2010
El Narco Transnacional - 2 MZO 10
La criminalización del consumo, la venta y el trasiego es una estrategia que en EU da resultado porque el crimen de allá sí está organizado: los jefes tienen acuerdos, mantiene el orden de sus capos y mayordomos en un mercado fraccionado por regiones, por razas y por fracciones de ciudad, como en Chicago.
El gobierno de EU es un gobierno funcional, que tiene organismos suficientemente poderosos para que la violencia y la corrupción no los rebase. El organismo más cuestionado de su gobierno es la DEA, sin embargo no sufre de parálisis por corrupción masiva.
El propio negocio narco de EU no pierde el control de sus capos ni sus pandillas del narcomenudeo; sus ajustes de cuentas son discretos y secretos; no afectan a la población civil, no producen escándalos mediáticos ni dejan crecer al crimen periférico, como el robo de automóviles o el secuestro.
Las corrupciones políticas más escandalosos de allá son las sexuales o de fraudes de los negocios legales, rara vez por asociación con el narco de EU. Aquí se sospecha de todos.
La política nacional de la Casa Blanca y del Senado es congruente entre sí cuando se trata del narco. Lo consideran igual que los gobiernos de Colombia, Venezuela, Brasil y México: una amenaza para el gobierno y el estado nacional.
Pero... las formas de control difieren sobremanera en territorio de EU: para empezar, ahí no hay “guerra contra el narco”; ahí no hay marines que pasen por encima de lo que haya qué pasar para combatir al enemigo; sin embargo, ahí mismo se aplauden las matanzas y la ingobernabilidad que causan los capos subdesarrollados de los cárteles de México, Colombia y sus sucursales en los otros países latinoamericanos. Vaya usted a saber por qué venta de armas...
El negocio narco, es un negocio transnacional por necesidad, mueve millones de dólares en EU y en los países productores. Se comporta igual que cualquier otro negocio ‘limpio’: a nivel financiero, es como el de la electrónica de punta; es semejante a las grandes productoras de alimentos y medicinas como Kellog’s o Pfizer; su estructura no difiere mucho de la de Corona, Tecate, Johnny Walker o Wyborowa, en el negocio del alcohol.
La única diferencia realmente importante es que ninguno de esos negocios ‘nocivos para la salud’ compite entre sí con asesinatos, ejecuciones, guerras armadas, secuestros, torturas, muertes colaterales de la población civil, corrupción desbocada en los poderes oficiales y fácticos hasta el grado de la ingobernabilidad; PORQUE NO SON ILEGALES.
Son negocios legales productores de adicciones al alcohol, a las pastillas psicotrópicas o a la comida chatarra asociada con la obesidad y la diabetes, sí; pero no están prohibidos y por tanto NO NECESITAN DISPARAR UN SOLO TIRO.
Pensándolo bien... Mientras no podamos entender la diferencia entre un negocio prohibido y otro del mismo giro legalizado, nos seguirá pasando lo que nos pasa; y cada vez peor.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100302NarcoTransnac.docx; 17:02; 2560Car.
El gobierno de EU es un gobierno funcional, que tiene organismos suficientemente poderosos para que la violencia y la corrupción no los rebase. El organismo más cuestionado de su gobierno es la DEA, sin embargo no sufre de parálisis por corrupción masiva.
El propio negocio narco de EU no pierde el control de sus capos ni sus pandillas del narcomenudeo; sus ajustes de cuentas son discretos y secretos; no afectan a la población civil, no producen escándalos mediáticos ni dejan crecer al crimen periférico, como el robo de automóviles o el secuestro.
Las corrupciones políticas más escandalosos de allá son las sexuales o de fraudes de los negocios legales, rara vez por asociación con el narco de EU. Aquí se sospecha de todos.
La política nacional de la Casa Blanca y del Senado es congruente entre sí cuando se trata del narco. Lo consideran igual que los gobiernos de Colombia, Venezuela, Brasil y México: una amenaza para el gobierno y el estado nacional.
Pero... las formas de control difieren sobremanera en territorio de EU: para empezar, ahí no hay “guerra contra el narco”; ahí no hay marines que pasen por encima de lo que haya qué pasar para combatir al enemigo; sin embargo, ahí mismo se aplauden las matanzas y la ingobernabilidad que causan los capos subdesarrollados de los cárteles de México, Colombia y sus sucursales en los otros países latinoamericanos. Vaya usted a saber por qué venta de armas...
El negocio narco, es un negocio transnacional por necesidad, mueve millones de dólares en EU y en los países productores. Se comporta igual que cualquier otro negocio ‘limpio’: a nivel financiero, es como el de la electrónica de punta; es semejante a las grandes productoras de alimentos y medicinas como Kellog’s o Pfizer; su estructura no difiere mucho de la de Corona, Tecate, Johnny Walker o Wyborowa, en el negocio del alcohol.
La única diferencia realmente importante es que ninguno de esos negocios ‘nocivos para la salud’ compite entre sí con asesinatos, ejecuciones, guerras armadas, secuestros, torturas, muertes colaterales de la población civil, corrupción desbocada en los poderes oficiales y fácticos hasta el grado de la ingobernabilidad; PORQUE NO SON ILEGALES.
Son negocios legales productores de adicciones al alcohol, a las pastillas psicotrópicas o a la comida chatarra asociada con la obesidad y la diabetes, sí; pero no están prohibidos y por tanto NO NECESITAN DISPARAR UN SOLO TIRO.
Pensándolo bien... Mientras no podamos entender la diferencia entre un negocio prohibido y otro del mismo giro legalizado, nos seguirá pasando lo que nos pasa; y cada vez peor.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100302NarcoTransnac.docx; 17:02; 2560Car.
lunes, 1 de marzo de 2010
Profesiones de riesgo - 1 MZO 10
La muerte de la joven operadora de radio de la Cruz Roja de Culiacán viene a aumentar la lista de profesiones de alto riego.
Claro que NO fue un accidente, y de nada sirve que el asesino lo crea así para salvarse de su culpa y poder dormir a gusto. No creo realmente que el sentimiento de culpa quepa en la neuro-psicosis de un sicario enloquecido por encima de su locura cotidiana; creo por el contrario que tratará de hacer alguna broma macabra entre sus compas, que tal vez le servirá al condimento de algún párrafo de novela narca, pero a él no; ni a nosotros tampoco.
No, la responsabilidad es de todos los directamente involucrados con la seguridad pública, y de ahí se derrama la culpa hacia todos los que informamos y a todos ustedes, que solo salen a trabajar todos los días para sobrevivir y sostener a sus familias.
Y precisamente a trabajar salió María Genoveva, a sus 21 años, apenas rebasada su adolescencia; y en su trabajo murió de un balazo en la cabeza, por el total importamadrismo social (porque ‘psicopatía’ o ‘sociopatía’ ya no dicen absolutamente nada) que desborda la actuación de un sicario en el paroxismo del asesinato, por encargo de su capo del negocio narco.
Otra muerte obscena de una persona inocente y joven que nos cae en los hombros a todos los que nos tragamos como idiotas el cuento de la prohibición del negocio narco, pero nos negamos a pensar siquiera lo que pasaría si se prohibiera el negocio del alcohol.
La lista de profesiones de riesgo aumenta tanto que pronto nos abarcará a todos; ya no solo a los periodistas, a los policías y a los propios delincuentes por obviedad, sino también a los políticos en medio de sus discursos llenos de falsas promesas electorales de acabar con la violencia narca y, si nos presionan tantito, habrá que inscribir a los voluntarios católicos de Cáritas, que se meten heroicamente en las áreas de pobreza extrema a repartir alimentos y medicinas.
Los vecinos de la colonia donde se oyen balazos toda la noche, o sea la colonia donde usted vive, tendrán que agregarse a la lista, por el oficio de ser un jefe de cualquier familia en su propia casa, donde no se oye ninguna sirena.
Y cuando la policía declara que no tiene ningún reporte, solo puede tener un significado concreto:
Todo se ha vuelto un oficio o profesión de riesgo simplemente porque no existe ningún cuerpo de seguridad que realice su trabajo cabalmente; ni municipal, ni estatal ni federal; ni siquiera el ejército que es la mayor fuerza armada del estado nacional.
La lista actualizada lo incluye ahora a usted que es maestro, sacerdote, trabajadora social, médico de un hospital general, bolero, despachador, puestero en el mercado, mecánico, chofer de autobús, taxi o camión materialista; mayordomo de una siembra, almacenista, cajero de súper, despachador de gasolina, repartidor a domicilio, vendedor de bienes raíces, gerente de sucursal de lo que sea, estudiante, alumno de primaria o jardín de niños, madre de familia paseando su bebé, deportista haciendo ejercicio… Si su oficio o profesión no aparece en esta lista, eso no significa que no sea también una profesión de alto riesgo.
Pensándolo bien... Lo siento mucho, pero si esta exageración le parece a usted creíble, entonces no es exageración.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100301Profesiones.docx; 12:15; 2791Car.
Claro que NO fue un accidente, y de nada sirve que el asesino lo crea así para salvarse de su culpa y poder dormir a gusto. No creo realmente que el sentimiento de culpa quepa en la neuro-psicosis de un sicario enloquecido por encima de su locura cotidiana; creo por el contrario que tratará de hacer alguna broma macabra entre sus compas, que tal vez le servirá al condimento de algún párrafo de novela narca, pero a él no; ni a nosotros tampoco.
No, la responsabilidad es de todos los directamente involucrados con la seguridad pública, y de ahí se derrama la culpa hacia todos los que informamos y a todos ustedes, que solo salen a trabajar todos los días para sobrevivir y sostener a sus familias.
Y precisamente a trabajar salió María Genoveva, a sus 21 años, apenas rebasada su adolescencia; y en su trabajo murió de un balazo en la cabeza, por el total importamadrismo social (porque ‘psicopatía’ o ‘sociopatía’ ya no dicen absolutamente nada) que desborda la actuación de un sicario en el paroxismo del asesinato, por encargo de su capo del negocio narco.
Otra muerte obscena de una persona inocente y joven que nos cae en los hombros a todos los que nos tragamos como idiotas el cuento de la prohibición del negocio narco, pero nos negamos a pensar siquiera lo que pasaría si se prohibiera el negocio del alcohol.
La lista de profesiones de riesgo aumenta tanto que pronto nos abarcará a todos; ya no solo a los periodistas, a los policías y a los propios delincuentes por obviedad, sino también a los políticos en medio de sus discursos llenos de falsas promesas electorales de acabar con la violencia narca y, si nos presionan tantito, habrá que inscribir a los voluntarios católicos de Cáritas, que se meten heroicamente en las áreas de pobreza extrema a repartir alimentos y medicinas.
Los vecinos de la colonia donde se oyen balazos toda la noche, o sea la colonia donde usted vive, tendrán que agregarse a la lista, por el oficio de ser un jefe de cualquier familia en su propia casa, donde no se oye ninguna sirena.
Y cuando la policía declara que no tiene ningún reporte, solo puede tener un significado concreto:
Todo se ha vuelto un oficio o profesión de riesgo simplemente porque no existe ningún cuerpo de seguridad que realice su trabajo cabalmente; ni municipal, ni estatal ni federal; ni siquiera el ejército que es la mayor fuerza armada del estado nacional.
La lista actualizada lo incluye ahora a usted que es maestro, sacerdote, trabajadora social, médico de un hospital general, bolero, despachador, puestero en el mercado, mecánico, chofer de autobús, taxi o camión materialista; mayordomo de una siembra, almacenista, cajero de súper, despachador de gasolina, repartidor a domicilio, vendedor de bienes raíces, gerente de sucursal de lo que sea, estudiante, alumno de primaria o jardín de niños, madre de familia paseando su bebé, deportista haciendo ejercicio… Si su oficio o profesión no aparece en esta lista, eso no significa que no sea también una profesión de alto riesgo.
Pensándolo bien... Lo siento mucho, pero si esta exageración le parece a usted creíble, entonces no es exageración.
http://jperezrobles.spaces.live.com; PB100301Profesiones.docx; 12:15; 2791Car.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)